martes, 2 de agosto de 2022

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'Viajan' con Bunbury

LUNES, 29 DE NOVIEMBRE DE 2004 6 fotos

Fotos:El Siglo de Torreón 29 de noviembre 2004.

48335 — El Viento a Favor sopló sin poder apagar las luces intermitentes de algunos encendedores de la audiencia; los Restos del Naufragio detuvieron su embarcación para presentar a Alicia, que desde la última actuación de Bunbury en Torreón, fue pedida por los presentes sin éxito. Le siguieron Infinito y Lady Blue, Apuesta por el Rock and Roll y Sí.
El tiempo se fue sin sentir, era hora de volver a la realidad. Poco a poco el Auditorio fue tomando su imagen habitual, la cancha se vaciaba mientras las caras satisfechas y agotadas de la gente daban paso al caos en la puerta de salida... “ojalá venga pronto otra vez, aquí lo esperamos”, se distinguió una voz entre la multitud.

48336 — El ambiente no podía ser mejor, Bunbury ya se había echado a la bolsa a hombres y mujeres, a paramédicos y los vendedores de cerveza, quienes le festejaron cada uno de sus movimientos así como su potente voz.

48337 — Los gritos de la gente estremecían la piel, unos lo veían incrédulos como si se tratara de una aparición mientras que otros levantaban sus brazos en señal de triunfo. Pero todos, sin excepción, formaron el coro monumental que lo acompañó a lo largo de los ciento diez minutos de concierto y que dejó claro que aunque surjan nuevos cantantes siempre estarán con él, con el artista que se lanzó a la fama con los Héroes del Silencio pero que está forjando su propia historia como solista.

48338 — Con chaleco negro de botones sobre una camisa dorada de seda, saco negro, pantalón acampanado y sombrero de copa dura, Bunbury comenzó el trayecto con Señorita Hermafrodita al resplandor de las luces predominantemente rojas del escenario, y proyecciones visuales detrás de éste.

48339 — El recinto deportivo cambió totalmente; el fresco que siempre lo envuelve se transformó en una hoguera de sentimientos encontrados, la cancha sirvió de punto de reunión a mil 500 personas (hombres en su mayoría) ansiosas de buena música, y el foro fue el altar que albergó al hombre de semblante melancólico y que ya es considerado una leyenda del rock iberoamericano.

48340 — La valla que separaba el escenario de la gente parecía venirse abajo; los ánimos se calentaron, las emociones se desbordaron... y es que tuvieron que esperar dos años para que su “héroe” regresara a casa, 24 meses de seguir fieles a su nombre y de soñar con la fecha en que volvería para romper nuevamente “el silencio” del Auditorio Municipal... el “Viaje” que el astro español Enrique Bunbury hizo sí tuvo un destino: la Comarca Lagunera.

'Viajan' con Bunbury

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