Foto: EFE, AP
30 de junio de 2006
Derrota 5-3 (global) Alemania a Argentina en penales.
La prórroga terminó y solo quedaba la suerte de los penaltis. Ayala falló el segundo de los lanzados por la "albiceleste" y los congregados no daban crédito.
Esteban Cambiasso lanzó el cuarto de Argentina, y en sus botas tuvo el segundo fallo de la albiceleste.
Los congregados, que no querían mirar, no lo podían creer, Jens Lehman, portero alemán, les mandaba a casa.
Final del partido, prórroga y sufrimiento entre los congregados. Animos en la grada, aunque se veía que se había perdido "la" oportunidad y que todo terminaría desde los fatídicos "penales".
Así, en las postrimerías del partido, cuando alguno ya contaba los segundos que quedaban para el final del partido llegó el gol de Miroslav Klose, al que siguieron todo tipo de lamentos, gritos de desesperación e incluso alguna lágrima.
Los minutos siguientes fueron de felicidad y reconocimiento a sus compatriotas, pero el progresivo dominio de Alemania del partido hizo aflorar los nervios en los "espectadores".<
Los miles de aficionados argentinos lloraron al ver como el portero alemán Jens Lehman acababa con las aspiraciones de la albiceleste de pasar a las semifinales del Mundial, tras parar dos de los lanzamientos de la tanda de penaltis.
Poco antes, y atrapado por sus propias convicciones, Pekerman dejó en el banco a Lionel Messi y Pablo Aimar y con ello cerró una hendija a la esperanza de Argentina, eliminada por Alemania por el pase a las semifinales de la Copa Mundial.
Bierhoff apareció en medio de la trifulca desencadenada en el terreno de juego tras los lanzamientos de penaltis, acosado por varios jugadores argentinos.
El centrocampista alemán Torsten Frings vio así los incidentes: "Nos dieron varios golpes. Los argentinos no se han comportado correctamente, han sido unos malos perdedores".
La FIFA anunció que investigará los incidentes pero no precisó si el Comité de Disciplina tomará medidas contra los responsables. Al parecer, el árbitro del partido, el eslovaco Lubos Michel, mostró tarjeta roja a Cufré por los incidentes.
La propuesta de Argentina fue anestesiar el juego y en eso Riquelme fue llamado a su especialidad, aunque a veces la perdía por hacer una de más.
Se entienden las lágrimas que surcaban las mejillas del centrocampista argentino en el césped del Olímpico de Berlín después de que su disparo fuera detenido por el alemán Jens Lehmann.
Jens Lehman atajó dos penales para darle a Alemania el pase a las semifinales de la Copa del Mundo con una victoria 4-2 ante Argentina en una definición por esa vía luego que el partido finalizara 1-1.
Ojos rojos, voces quebradas, cabezas gachas. Uno tras otro, los jugadores de la selección argentina que desfilaron por la zona de entrevistas después de quedar eliminados del mundial no pudieron esconder la amargura provocada por el revés ante Alemania en los cuartos de final en una definición de paneles
