Karim Benzema resultó de nuevo providencial y con un gol de cabeza a pase de Vinicius en la prórroga firmó la clasificación del Real Madrid para las semifinales de la Liga de Campeones después de estar prácticamente eliminado por el defensor del título y su verdugo el pasado curso, el Chelsea, que acabó sucumbiendo a la mística de los blancos en este tipo de situaciones en la máxima competición continental.