NUEVA YORK, NY, (AP).- Dave Campo fue despedido ayer como entrenador de los Vaqueros de Dallas, mientras que los Bengalíes de Cincinnati se deshicieron de Dick LeBeau y Jacksonville hizo lo propio con Tom Coughlin.
Campo, el quinto entrenador en la historia de los Vaqueros, es el primero que deja su puesto con una foja perdedora (15-33). Es también el único que se ha marchado sin ganar un solo título divisional y sin clasificarse jamás a la postemporada. Su salida pone fin a una atribulada gestión de tres años y posiblemente allanará el camino para la llegada de Bill Parcells. El anuncio era esperado desde hace más de una semana. El dueño del equipo, Jerry Jones, comenzó a dialogar con Parcells desde hace un par de semanas y las conversaciones han adquirido un tono más formal en los últimos días. Jones habló también con el ex entrenador de los Vikingos de Minnesota, Dennis Green.
Tom Coughlin fue despedido por los Jaguares de Jacksonville después de tres temporadas consecutivas con foja perdedora. Coughlin, quien terminó su labor de ocho años como entrenador y gerente general, parte con una marca de 72-64 y con dos derrotas en el juego por el título de la Conferencia Americana. Jacksonville ha tenido una foja de 19-29 durante los últimos tres años y sus seguidores se han alejado del estadio. Este año, el equipo sumó seis victorias por diez tropiezos.
Bajo las órdenes de LeBeau, los Bengalíes fueron el hazmerreír de toda la liga, con la peor temporada en la historia de la franquicia. LeBeau fue el primer entrenador despedido en la liga, luego de una temporada sumamente irregular, en la que prácticamente todos los equipos, salvo los Bengalíes, tuvieron oportunidad de avanzar a la postemporada hasta las últimas jornadas. Los Bengalíes fueron a los tumbos y finalizaron últimos de la NFL, con foja de 2-14. Los repetidos tropiezos acabaron con la paciencia del propietario del equipo, que inicialmente se resistía a un golpe de timón.