AP
CARACAS, VENEZUELA.-Las aerolíneas venezolanas acordaron mantenerse al margen del paro general, pero los propietarios de las empresas aéreas no descartan pararse en breve.
¿La Razón? La poca afluencia de pasajeros no compensa los costos operativos de las aeronaves.
El director ejecutivo de la Asociación Venezolana de Líneas Aéreas en Venezuela, Humberto Figuera, indicó que desde el lunes se han visto obligados a cancelar decenas de vuelos internos o fusionar algunos otros debido a la escasez de pasajeros.
“En los dos primeros días de paro se canceló el 80 por ciento de los vuelos, mientras que el 20 por ciento restante se fusionó por acuerdo entre las distintas empresas para cumplirle a los pasajeros”, declaró a la prensa.
“Hemos tratado de mantener activas las rutas a las más importantes ciudades del país, pero en la medida que el paro ha seguido el número de viajeros a continuado mermando”, señaló.
“La merma de pasajeros a hecho que los costos sean insostenible. Espero que el paro lo levanten pronto para que todo vuelva a la normalidad”, afirmó.
Según el ejecutivo, la industria petrolera es una de las que más pasajeros mueve a ciudades como Barcelona y Maracaibo, en donde se encuentran las principales refinerías del país, pero como consecuencia del paro el número de pasajeros ha disminuido de manera acentuada. “Obviamente no están laborando a plenitud”, añadió.
“Hemos perdido mucho dinero en éste y los otros paros”, dijo Figuera en alusión a que está es la cuarta protesta de ese tipo que realiza la oposición en contra del presidente Chávez en lo que va de año. Los paros, unido a la crisis que vive el sector tras los atentados terroristas del 11 de septiembre del 2001, han “agravado nuestros problemas financieros”, acotó.
La totalidad de los vuelos internacionales, por su parte, han partido del aeropuerto internacional Simón Bolívar, el mayor del país, con absoluta normalidad, aunque también se ha evidenciado una reducción en el volumen de pasajeros, se informó.
El paro convocado por la oposición busca que Chávez se separe de la presidencia, argumentando que ha puesto la democracia en peligro debido a sus tendencias autoritarias. Lo acusan de querer imponer políticas socialistas, fomentar la división de clases sociales y administrar mal la economía.