El secretario del Ayuntamiento de Durango, José Luis Cisneros Pérez, expresó que no se cometió ninguna violación a la Constitución en la reforma aprobada al Reglamento de Tránsito del Municipio, dado que el Cabildo cuenta con facultades para modificarlo, como lo sostiene el diputado local Alfonso Mercado Chávez, pues el objetivo de fondo es evitar la existencia de “cantinas rodantes”.
Indicó que se es respetuoso de la opinión del legislador local, sin embargo, en ningún momento argumenta su razón de inconstitucionalidad, y, en contraparte, el artículo 115 constitucional otorga a los ayuntamientos facultades para adecuar las normas necesarias para una mejor convivencia social de la vida cotidiana en los municipios.
Explicó que el objetivo fundamental de la reforma aprobada el pasado viernes, consistente en aplicar una infracción de 20 salarios mínimos a los choferes de vehículos que permitan en la unidad el consumo de bebidas con contenido alcohólico, drogas y psicotrópicos, porque aunque el conductor vaya sobrio, tolerar esa situación constituye un distractor.
Cisneros Pérez mencionó que Mercado Chávez afirma que la reforma aprobada es violatoria a la ley, pero ¿de cuál país?, cuestionó, porque de México no, en virtud de que la propia Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos confiere facultades a los Ayuntamiento para expedir y modificar reglamentos que rijan la vida de los municipios, sin violentar las garantías individuales.
Comentó que en el caso de referencia, no existe ninguna violación a las garantías individuales al prohibir que el conductor tolere que en su vehículo se ingieran bebidas embriagantes, drogas o psicotrópicos, dado que se busca salvaguardar la integridad física de terceros, pero al mismo tiempo, evitar “centros de vicio rodantes”.
Estableció que a la par de lo anterior, el Presidente Municipal ha solicitado a la Subdirección de Vialidad Municipal que los agentes de la corporación apliquen de forma adecuada los criterios al momento de levantar una infracción, puesto que no es motivo de sanción que se traslade a una persona ebria o se lleve bebidas con contenido alcohólico cerradas, puesto que la sanción es al consumo.
Destacó que en el marco del Programa “Cero tolerancia a la impunidad”, la autoridad municipal ha dado muestras que la moralización de los actos que realizan las corporaciones de tránsito y seguridad pública va en serio, prueba de ello son la remoción de 40 elementos, que fueron cesados por no sujetar sus actos a lo que establece la ley.