(1ª. Parte)
Ésta es una enfermedad que se caracteriza por el deterioro del tejido óseo, haciendo que los huesos sean cada vez más frágiles
Desde la niñez es importante ocuparse de la prevención de la osteoporosis, pero una vez llegada la menopausia es especialmente importante tomar acciones en contra de esta enfermedad, ya que a partir de ese momento, el hueso comienza a perder su capacidad para mantenerse calcificado. Esto está causando por la disminución en la producción de estrógenos (hormonas femeninas), que son las principales encargadas de mantener el esqueleto saludable.
Es muy recomendable que las mujeres que tienen una edad dentro de los 45 y 55 años acudan al médico, para que les oriente sobre la osteoporosis y les mande realizar los estudios con los que podrá detectar si la padece, o si tiene tendencia a desarrollarla, así podrá actuar antes de que se presente la primera fractura.
Es característico de esta enfermedad que progrese sin ningún síntoma y que su primera señal sea una fractura por un golpe menor. Aunque la osteoporosis afecta principalmente a las mujeres después de la menopausia, los hombres no están exentos de poder padecerla, por eso también ellos después de los 50 años deben acudir a su médico para informarse si están en riesgo. El peligro de sufrir una fractura en la muñeca, las vértebras o en la cadera por un golpe menor no es una consecuencia natural de la vejez o menopausia, es resultado de la osteoporosis, que no se presenta en todas las personas. Por eso, debemos saber, cuáles son los factores que ayudan a que esta enfermedad se desarrolle, y saber si estamos en riesgo de padecerla. Los factores de riesgo de osteoporosis son:
*Ser mujer.
*Haber pasado la menopausia.
*Tener antecedentes de familiares con osteoporosis.
*Tener una estatura más baja que el promedio de las mujeres.
*Fumar.
*No practicar ningún ejercicio de manera regular.
*El consumo exagerado de alcohol.
*Ser muy delgado(a).
*Tomar más de 3 tazas de café al día.
*Consumir mucho refresco de cola.
Cuando llegue la menopausia debe visitar a su médico, sin importar si presenta alguna molestia o síntoma, él le dirá el plan de prevención más adecuado a sus circunstancias.
EJERCICIO: El ejercicio físico es un elemento primordial, ya que por la fuerza a la que se somete el hueso con el movimiento de los músculos, se ayuda a mantener la densidad ósea previniendo así la osteoporosis, y por consiguiente el riesgo de sufrir una fractura. Así el médico podrá recomendar el tipo de ejercicio que pueda ser practicado por la persona, indicándole tanto la intensidad como la variedad que se pueda hacer, evitando que se generen molestias. El ejercicio físico es bueno para evitar la osteoporosis, por 2 razones:
Primera: Las presiones a las que se somete el hueso lo hacen reaccionar y favorecen la calcificación.
Segunda: La fuerza y agilidad que se adquieren evitan la torpeza y las caídas. (Continúa).