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México, D.F.- El presidente Vicente Fox afirmó ayer que el cambio que impulsa sólo tiene sentido si beneficia de forma directa e inmediata y contribuye a abrir nuevos horizontes para el desarrollo de las niñas y niños de México.
En la presentación del programa "Un México Apropiado para la Infancia y la Adolescencia", Programa de Acción 2002-2010, anotó que como nunca antes, el gobierno y la sociedad compartimos la responsabilidad histórica de atender sus demandas y necesidades.
Nuestros hijos, puntualizó, tienen derecho a una vida tranquila, plena y feliz; una vida llena de oportunidades efectivas de educación y salud, de alimentación y deporte, pero también de recreación y cultura.
En el salón Adolfo López Mateos de la residencia oficial de Los Pinos, acompañado de su esposa Marta Sahagún, destacó que "no podemos darnos el lujo de fallarles, porque lo que está en juego es el presente y el porvenir de nuestra gran nación".
Mencionó que en el programa presentado están los compromisos para dar plena vigencia a los derechos de los niños y jóvenes y las estrategias para combatir con mayor fuerza la ignorancia, la desnutrición, la pobreza, el abandono que sufren muchos de ellos.
En el acto, en el que estuvo Carol Bellamy, directora ejecutiva de Unicef, explicó que se trata de un programa que atiende con especial énfasis a las y los menores más vulnerables, como es el caso de indígenas y migrantes.
Además, el jefe del Ejecutivo Federal señaló que el programa ofrece respuestas a las víctimas de violencia, pornografía y prostitución, así como a quienes viven con SIDA o han caído en las redes de la drogadicción.
Dijo que el programa marca un cambio de fondo en la agenda de trabajo a favor de estos grupos de población, pues no sólo se han definido metas más ambiciosas, sino que también nuevos métodos y acciones de evaluación y seguimiento.
Los temas incluidos y los que se incorporen próximamente serán la guía y la inspiración a todos los actores que luchamos por la causa infantil y juvenil desde diferentes trincheras, agregó el presidente Fox Quesada.
Recordó que al lanzar el programa, México cumple anticipadamente con los compromisos adquiridos ante los organismos mundiales de los que forma parte, como es el caso de la Unicef y lo hace con una visión de Estado, para garantizar política públicas consistentes y de largo plazo.
"Aunque teníamos hasta diciembre del año 2003 para atender esta encomienda, decidimos hacerlo cuanto antes, porque lo consideramos un imperativo ético y social, además un asunto de urgencia a atender en nuestro país", expresó.
Señaló que también se ha propuesto cumplir con anticipación varias de las metas acordadas para el año 2010 por los 180 países participantes en la reunión de las Naciones Unidas.
Concretamente se propone avanzar con mayor rapidez en la reducción de la mortalidad de las niñas y niños menores de cinco años, en la batalla contra la desnutrición y en el mejoramiento de la calidad de la enseñanza, agregó.
De esta forma, anotó que el programa Oportunidades hoy da cobertura a cuatro millones 240 mil familias, para asegurar nutrición, educación y salud a todos los niños de estas familias.
Además, comentó que se ha comprometido a redoblar el paso en el combate al SIDA, en la protección de los derechos infantiles, en el abatimiento de la mortandad asociada al parto, que es un renglón en el que se han acumulado rezagos.
Insistió, entonces, en que con el lanzamiento de este programa y la decisión y compromiso de cumplir las metas con anticipación, nuestro país demuestra que la lucha a favor de las niñas y niños, de los jóvenes es en serio, es a fondo y es integral.
El presidente Fox hizo un llamado a las autoridades locales para impulsar la elaboración de programas estatales y municipales a favor de las nuevas generaciones, "en este campo como en muchas otras áreas, el federalismo y la descentralización es esencial para avanzar más rápido", concluyó.