A más tardar el 15 de noviembre próximo, la Federación de Estado CTM presentará poco más de 230 emplazamientos a huelga con una demanda de incremento salarial del 25% y vigencia de estallamiento para el 15 de enero del año 2003, según lo adelantó el dirigente cetemista, Antonio Yáñez Mena.
El también líder del sindicato de tahoneros de la entidad, reconoció que el porcentaje sobre el que estarán basados los avisos de huelga de la CTM es elevado, si se compara con los incrementos salariales que se han registrado en las últimas revisiones contractuales en el país (no han rebasado el 4.5% de aumento directo); sin embargo, dejó claro que la pretensión de la central obrera será negociar. Primero, teniendo como “piso” el ajuste que determine a finales de este año y con efecto a partir del primero de enero la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, para a partir de ese parámetro exigir a cada empresa el aumento que cada una en lo particular realmente pueda otorgar a sus trabajadores.
“Tenemos claro –añadió Yánez Mena- que los salarios en nuestra entidad son precarios y que el poder adquisitivo de los trabajadores se pulveriza cada día más; aun así no le apostamos a conflictuarnos con los representantes del capital, sino simple y sencillamente negociar hasta donde sea posible para conseguir que el trabajador se vea más beneficiado”.
Dijo que la Confederación de Trabajadores de México es consciente de la situación económica que impera en el país, y en ese sentido apuntó que la central obrera está al pendiente del crecimiento o deterioro que registran las empleadoras en la localidad; “por eso, le reitero, no descartamos la idea central de negociar, porque habrá empresas que puedan darnos menos del 4.5%, pero también habrá otras que puedan dar mucho más... y así será”.
Antonio Yáñez, representante de los trabajadores ante los tribunales laborales de carácter estatal en Durango, reiteró que se esperan cosas muy difíciles en el proceso de revisión salarial del próximo año, ya que, contrario a lo que cada mes de enero se promete, no ha habido acercamiento alguno entre los representantes del trabajo y sus homólogos del capital –los dueños de las empresas o los voceros de cada sector.
Por ello auguró, cuidando de no ser fatalista, que la revisión se tensará conforme se acerque el ultimátum que contemplan los casi 230 emplazamientos de la federación cetemista: el 15 de enero de 2003.