MÉXICO, D.F.- El pleno de la Cámara de Diputados aprobó ayer por unanimidad una reforma que prevé elevar de 18 a 27 años de cárcel contra quienes abusen o exploten sexualmente a menores, así como crear agencias, peritos y ministerios públicos especializados en estos delitos.
Asimismo se prevén cambios a los mecanismos de investigación de casos de pedofilia y pederastas para evitar el careo entre la víctima y el victimario, así como no afectar a los menores en las reconstrucciones de hechos.