El Sindicato de la Alianza de Camioneros coincide con el del organismo choferil adherido a la CTM, al advertir que no hay justificación para no incrementar las tarifas del transporte público en el 2003, ante lo cual, Raúl Medina Samaniego estableció: “No vamos a permitir que por cuestiones políticas el Gobierno del Estado se nos diga que no habrá aumento en este rubro”.
Raúl, secretario general del Sindicato de Choferes y Trabajadores Conexos de la Alianza de Camioneros de Durango, dejó claro que la postura de esa organización de transportistas no cambiará en torno al particular asunto, ya que durante el 2002 se registraron innumerables e impactantes incrementos en los insumos del transporte urbano, como el combustible, las refacciones, llantas y reparaciones, por ejemplo, y por ello está más que justificado el ajuste de manera proporcional a lo que ocurrió en este año.
Indicó que aceptarán, sin embargo, la realización de un estudio socioeconómico serio y bien fundamentado, porque del resultado que éste arroje dependerá el aumento que se aplicará al transporte público en sus diferentes modalidades.
Medina fue claro al resaltar: “No tenemos que pensar si puede o no darse el incremento. Ya presentamos nuestra solicitud para que sean ajustados los cobros del transporte en todas sus modalidades, y ese aumento debe darse, no de manera desproporcionada ni mucho menos, sino únicamente en base al incremento que registraron todos nuestros insumos”.
Acotó que al hacerse el estudio socioeconómico y técnico que propone la Alianza de Camioneros, con facilidad se determinará en cuánto se ha elevado el costo de operación de los transportistas.
“No vamos, enfatizó, a aceptar que nos autoricen 20 centavos más a criterio político, porque no es de esa forma como se puede nivelar lo que se gasta e ingresa para el desempeño de la actividad choferil que los compañeros realizan”, sostuvo el líder del gremio de la Alianza.