El Fondo Monetario Internacional recomienda a México cambiar su sistema de control de la economía. Hasta ahora para disminuir las presiones que apuntan hacia la inflación, el Banco de México ha utilizado el “corto”. Esto quiere decir que se retira de la circulación una cantidad determinada de dinero, con lo que hay menor disponibilidad de circulante para otorgar créditos, lo que frena un tanto la economía.
La propuesta del FMI es que en lugar del “corto”, México flexibilice la tasa de interés que se paga a las inversiones, aumentándola o disminuyéndola, según se necesita. Esto permite que el curso de la economía sea más limpio y disminuye la discrecionalidad. En vez de que ante la demanda de efectivo la respuesta sea “No hay”, se cambiaría por: “Te presto a tanto”.
El proyecto ya fue aceptado por el Banco Central. Lo que aún no se sabe es cuánto tiempo se implantará la nueva modalidad. Los entendidos dicen que esto tomará un máximo de seis meses.
Por otra parte, para aclarar más todo el proceso económico, el FMI recomienda también que el presupuesto de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad se saque del presupuesto federal y se maneje por separado. Así aparecería la productividad de las dos más grandes empresas del país, cómo están apuntalando con sus impuestos al presupuesto federal o cómo y hasta qué punto el Gobierno federal las está subsidiando.
Varias agencias internacionales afirman que el crecimiento de México, como se esperaba, será en el 2002 de 1.7%. Pero lo que resulta alentador es que la perspectiva de crecimiento que ofrecen para el 2003, se sitúa entre el 4.5% y el 5.5%.
El Comisionado de la Unión Europea para América Latina urge a México que realice los cambios estructurales necesarios en el sector energético, laboral y fiscal, para modernizar el entorno económico. México está en la perspectiva de la Unión Europea, como muy importante por su cercanía con Estados Unidos.
Las inversiones de capital europeo podrían multiplicarse en los próximos años de manera notable si las reglas fueran claras, expeditas y fáciles de cumplir.
En la medida en que la inversión extranjera se multiplicar, permitiría que el presupuesto gubernamental se dedicara más y más a la creación de infraestructura: puertos, carreteras, aeropuertos, propiciando la integración y el desarrollo de nuevas zonas del país a un proceso de crecimiento acelerado.
En opinión de don Lorenzo Zambrano, presidente de Cemex, es indispensable terminar con las discusiones y los berrinches infantiles de los que tienen en su mano el futuro de México (las cámaras de Diputados y Senadores).
En vez de que el Poder Legislativo esté en un ejercicio de confrontación, descalificación y parálisis, para obtener futuros triunfos electorales, gastando su capital de tiempo en acusaciones mutuas de corrupción y de comisión de delitos, México les exige que cumplan con su obligación de servirle. No es posible que el Pemexgate y los Amigos de Fox, además de llenar diariamente los titulares y las páginas de los diarios, sean los asuntos importantes del país.
Ya pasaron cinco semanas de la actual sesión ordinaria de las Cámaras y todavía no aparece cuándo van a discutir y aprobar la Reforma Eléctrica. La nueva Ley de Telecomunicaciones está congelada, la Reforma del Estado no ha llegado al piso de las cámaras, la Reforma Fiscal ha quedado parchada con el “arreglo” del año pasado y ya se viene encima la discusión del Presupuesto del 2003, lo que impedirá, una vez más que se vaya a fondo en la modernización y fortalecimiento del Fisco.
La Reforma de la Ley Federal del Trabajo tiene varias propuestas: la de la Secretaría, la de la UNT, la del Congreso del Trabajo, pero hasta allí. ¿cuándo se va a discutir? ¿Cuándo se van a sentar las partes involucradas para negociar una nueva ley?
Es de dominio público la quiebra del IMSS y del ISSSTE, ¿Cuándo las Cámaras y el Ejecutivo se van a sentar para encontrar una solución a este aspecto tan importante del futuro de la nación?