Madrid, España.- El primer ministro británico Anthony Blair afirmó ayer ante los miembros de su Partido Laborista que hay que estar “preparados para la guerra”, en caso de que Iraq rechace cumplir los compromisos con Naciones Unidas (ONU).
“A veces, y sobre todo cuando se trata con un dictador, la única opción para alcanzar la paz es estar preparado para la guerra”, dijo Blair en su discurso de clausura de la conferencia laborista en Blackpool, en referencia al presidente iraquí Saddam Hussein.
El primer ministro inició su discurso de 54 minutos con el asunto de la guerra contra Iraq, en el que encuentra un fuerte rechazo de su partido y de los británicos en general, según reportó ayer el sitio web del diario “The Guardian”.
Blair señaló que la primera opción para lidiar con el asunto de Iraq, al que Estados Unidos acusa de almacenar armas de destrucción masiva, es la ONU, pero afirmó que en caso de que ese organismo fracase en su intento es necesario enfrentar a Iraq con las armas.
“Si (Hussein) no cumple...entonces destruirá no sólo la autoridad de Estados Unidos o la de Reino Unido, sino la de la propia ONU”, apuntó Blair en un intento por persuadir a sus compañeros laboristas de la necesidad de atacar a Bagdad.
Se pronunció a favor de hacer un ultimátum a Hussein para proceder con el cumplimiento de las resoluciones de la ONU, en especial permitir el retorno de los inspectores de armas a su territorio, o bien, proceder con una acción militar.
El primer ministro, criticado por el apoyo incondicional que brinda al presidente estadounidense George W. Bush, defendió la alianza con Estados Unidos al afirmar, “creo que en esta alianza, y lucharé largo y fuerte para mantenerla”.
Indicó que los valores que se defienden en una ofensiva contra Iraq no son de unos cuantos, “los valores estadounidenses son los nuestros también. Nuestros valores no son occidentales. Son valores humanos, y en cualquier parte, cualquier persona puede adoptarlos”.
A pesar del rechazo de los británicos a la postura de Blair, la parte que sí logró el aplauso de los laboristas fue cuando se refirió al conflicto de Medio Oriente, y en especial, cuando destacó que Israel también ha violado las disposiciones de la ONU.
“Algunos dicen que el asunto es Iraq. Otros dicen que el conflicto (israelí-palestino) de Medio Oriente. Yo digo que son ambos” dijo y agregó, “estoy de acuerdo en que las resoluciones de la ONU deben aplicarse en ese caso tanto como en el de Iraq”.
“Lo que pasa en el Medio Oriente es terrible y equivocado. Los palestinos viven en condiciones de humillación y desesperanza; los civiles israelíes son asesinados”, apuntó al hacer referencia al conflicto de más de dos años de duración.
El discurso de Blair también hizo referencia a asuntos internos como el uso de fondos privados para el desarrollo de los servicios públicos, en especial la construcción de escuelas y hospitales, uno de los asuntos más criticados de su programa de gobierno.
“No es el momento de abandonar nuestro viaje a la modernización, sino de llevarlo a cabo...Hemos hecho un buen comienzo, pero no hemos sido suficientemente valientes”, dijo el primer ministro en defensa de su proyecto del uso de fondos privados.
Blair también dedicó parte de su discurso a otros temas internos de gran controversia, como la criminalidad -que ha registrado aumentos notables en las últimas fechas-, la educación, el euro, los sindicatos, la educación, la ciencia y la agricultura.