GÓMEZ PALACIO, DGO.- Arturo Amaro Martínez, de 27 años, es el autor material del asesinato del ingeniero regiomontano, mediante oficio de colaboración, la Policía Ministerial logró su captura en la ciudad de Monterrey y junto con sus dos cómplices será consignado por homicidio calificado.
Sobre el último detenido, la Policía Ministerial informó que hace dos meses laboró como agente de la Policía Preventiva de Gómez Palacio y estuvo inscrito en la Academia de Policía, en este lugar conoció a Felipe de Jesús Martínez Gallegos, su instructor de defensa personal.
Por su parte, el subprocurador de Justicia, Joaquín Saucedo Flores, informó que el detenido tenía su domicilio en la calle Quino 428 de la colonia Valle Oriente, en Torreón, Coahuila.
El ex policía gomezpalatino tenía antecedentes penales, desde principios de año terminó de purgar una condena de cinco años por el delito de robo de vehículo, por lo cual estuvo recluido en los penales de Torreón y Monclova.
La ubicación de Arturo Amaro se dio mediante el informe que proporcionó Jorge Gómez Zermeño de 44 años, vecino del andador 20, número 242 sur, quien manifestó que el homicida fue a su casa para empeñarle la camioneta y al recibir una negativa, al final la dejó abandonada cerca de su casa.
Mediante este reporte, los ministeriales lograron investigar el domicilio del padre de Amaro y al ser cuestionado por el paradero de su hijo, les informó que viajó a la ciudad de Monterrey.
?Basados en los acuerdos para la detención por caso urgente, se logró la detención de Amaro Martínez, quien además del homicidio calificado también enfrenta el delito de robo?, dice Saucedo Flores.
En su declaración, Arturo acepta su autoría en el homicidio, así como el robo de algunos aparatos electrodomésticos que vendió a un ?coyote?.
Con la detención de este sujeto, se completa el aseguramiento de los tres participantes en este homicidio ocurrido la noche del 11 de septiembre y que fue descubierto la tarde del viernes 20 del presente mes.
Como se informó en su oportunidad, el jueves se logró la detención de Felipe de Jesús Martínez Gallegos de 24 años, y de Fernando de la Torre Berumen de 20 años.
Ambos aceptaron que estuvieron juntos el 11 de septiembre, día en que junto con Arturo dieron muerte a Marcos Guadalupe Almanza Vázquez de 29 años
Felipe de Jesús tiene su domicilio en la calle 26 número 343, de la colonia Fidel Velásquez, Fernando de la Torre vive en la calle México número 53 de la colonia Nogales.
Martínez Gallegos es un experto en artes marciales y tenía una escuela sobre la calzada Lázaro Cárdenas, frente a La Pulga, y además impartió varios cursos de defensa personal a las últimas generaciones de la extinta Academia de Policía de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Por su parte, De la Torre Berumen es estudiante de la ingeniería en Sistemas del Instituto Tecnológico de Lerdo, además de ser afecto a la práctica del deporte. El nexo de ambos implicados es que la casa de la abuela de Fernando está cerca del hogar de Felipe.
Fue por medio de las investigaciones realizadas por el representante social y de la Policía Ministerial como se logró la captura de los jóvenes.
Con la identificación del cuerpo encontrado semienterrado en el paraje La Canasta, la Policía Ministerial inició sus investigaciones con la declaración de los padres del joven, quines llegaron a esta ciudad el domingo 22 del presente, toda vez que su hijo llevaba días sin reportarse y lo esperaban en casa para festejar su cumpleaños.
Sobre el último domicilio de Marcos, se informó que vivía solo en la avenida Prolongación Madero número 491 ó 499, de la colonia Niños Héroes, en Ciudad Lerdo.
Según el certificado médico forense, el cadáver presentaba signos de una muerte provocada por asfixia por ahorcamiento, para la cual presuntamente se utilizó una sábana, las primeras investigaciones determinan que el joven ?desapareció? el 11 de septiembre.
Por último, el subprocurador mencionó que la acción de los implicados refleja los elementos del cuerpo del delito para ser catalogado como homicidio calificado y serán enviados ante el Juez Penal en turno.