SUN-AEE
México, DF.- Durante el año que termina, el monto de remesas familiares, es decir las divisas que mexicanos residentes en el exterior envían a sus familiares radicados en México, llegarán a cifra récord, al alcanzar 10 mil millones de dólares.
De acuerdo con un análisis del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), el dinamismo que registran en los últimos dos años estos flujos de divisas los convierten en la cuarta fuente de ingresos externos para el país, después de las exportaciones de maquiladoras, ventas de productos petroleros e inversión extranjera directa.
?Las remesas familiares se han convertido en un factor importante para el equilibrio de las cuentas externas, y una importante fuente de desarrollo regional, que supera significativamente los ingresos netos por turismo en 3.5 veces?, indica el CEESP.
Destaca que en las últimas dos décadas la entrada de recursos vía remesas familiares llegó a 8 mil 895 millones de dólares por año.
?En el año 2001, cuando se percibía que las remesas familiares disminuirían, debido a los eventos terroristas en Estados Unidos, fue precisamente cuando reportó el monto históricamente más elevado, con un incremento de 35%?, precisa.
Durante los primeros nueve meses de 2002, la entrada de remesas familiares al país fue de 7 mil 305 millones de dólares, cifra que representa 1.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB). En ese periodo, se realizaron 22.1 millones de operaciones de envío de remesas, de las cuales 92.4 por ciento fue por medios electrónicos, lo que involucró 90% de total de recursos contabilizados. Las divisas que envían los connacionales superan al PIB que generan las grandes divisiones de minería, así como la generación de electricidad y agua, con 1.2 por ciento. En pesos, el monto equivale a cerca de 70 mil millones, más de lo esperado en ingresos por conceptos como el impuesto al activo, y de la recaudación conjunta del impuesto sobre tenencia y uso de vehículos y del impuesto sobre automóviles nuevos.
Más de la mitad de las remesas familiares se concentran en seis entidades federativas, y en algunos casos supera los ingresos que en ellas se reciben como participaciones del gobierno federal.
No obstante, el CEESP destacó que aún cuando el monto de recursos captados vía remesas familiares ha crecido significativamente, los beneficios se concentran en un reducido número de hogares en el país.