El alargamiento de corona
La cirugía periodontal “alargamiento de corona” para favorecer la estética en pacientes con exposición incompleta de la corona anatómica (la parte visible de dientes o molares en boca) y/o una línea de sonrisa alta es un procedimiento muy útil, pero poco utilizado.
Usted evaluar la necesidad de este procedimiento: observe su sonrisa, el labio se desplaza en dirección superior (apical) quedando al descubierto la totalidad de sus dientes frontales o incisivos superiores y uno o dos milímetros de encía. Cuando la altura de encía enseñada sobrepasa estos dos milímetros se denomina sonrisa gingival, esto pudiera ser una definición sin embargo a nosotros nos debe interesar la sonrisa que nos llama la atención por el exceso de encía.
Esta situación carece de importancia como verdadera patología y únicamente considerémosle en su consecuencia cosmética, tomemos los siguientes parámetros:
El margen superior (cervical) de los dientes con respecto al labio superior.
Borde de los dientes o incisal respecto al labio inferior.
Que exista un balance entre un plano relacionado al borde de dientes (incisal) y de molares (oclusal).
La presencia de dientes excesivamente cortos por erupción incompleta es la causa más periodontal (con relación a encía) de todas las posibles sonrisas gingivales, siendo las restantes de origen más ortodóntico-ortognático (mal posición dental y desarrollo de huesos de la cara maxilares).
Una sonrisa asimétrica ocasionará una exposición asimétrica de encía, lo cual se corrige con una enlongación (alargamiento) coronaria, la cirugía tiene por objeto aumentar la longitud dental, en armonía con la línea bipupilar y no en armonía con el labio superior.
Un diente corto puede presentarse con el nivel de hueso a su nivel normal, 2 mm por debajo de la unión amelo-cementaria (relacionada a la unión de la corona o cabeza visible y la raíz dental) o con una distancia menor (erupción pasiva alterada) estas dos situaciones condicionan terapias quirúrgicas diferentes.
Si el hueso está a una altura normal, bastará una reducción de tejido gingival (encía) mientras que si el hueso está más próximo a la línea amelo-cementaria, la cirugía debe incluir remodelación del hueso.
Otras consideraciones a evaluar en su sonrisa:
Cuando los dientes superiores no tienen contacto con los inferiores condicionan al maxilar superior a lo que denominamos “curva de spee” invertida esta situación se aprecia debido a que el plano de las caras masticatorias de los molares (oclusal) presenta una línea recta hacia el camino, siendo a partir de ahí donde se aprecia una sobreerupción de los dientes del grupo incisal.
El tratamiento de esta sonrisa gingival debe realizarse normalizando el plano oclusal, intruyendo (metiendo) los dientes anteriores hasta recuperar su nivel con los planos oclusal posterior. En principio, esta normalización se realiza por medios ortodónticos, siempre que la mecánica ortodóntica consigna una verdadera intrusión de estos dientes y no una intrusión relativa por nivelación del plano oclusal por extrusión (salida) de los dientes posteriores (antes de iniciar el tratamiento descartar una clase II esquelética).
La distancia media del labio superior, medida desde la base de la nariz hasta el borde húmedo del labio, es de aproximadamente 20 a 22 mm en las mujeres y de 22 a 24 mm en varones, en el caso de que la sonrisa gingival esté ocasionada únicamente por un labio corto o por una hiperactividad de éste, ningún tratamiento es aconsejable, sin embargo se recomienda discutir esta limitación con el paciente.
El concepto “ideal” de estética preconiza un margen de encía de los dientes centrales asimétrico y que se localice casi 1 mm en sentido apical al margen gingival de los dientes incisivos laterales. Los márgenes de encía de los caninos se deben localizar aproximadamente a 1 mm en dirección apical (abajo del margen de encía) con respecto a los dientes incisivos centrales. Una línea trazada desde la cresta gingival (parte alta de encía del margen) de un canino a la del otro debe ser paralela a la línea interpupilar.
Una sonrisa deberá exponer una mínima cantidad de encía en sentido apical (bajo nivel de la encía) a los incisivos centrales y los caninos y el contorno gingival debe armonizar con el labio superior. En el caso de una sonrisa muy amplia el remodelado gingival deberá extenderse hasta los premolares (dientes inmediatos o caninos-colmillos) para completar la armonía.