TORREÓN, COAH.- Las próximas elecciones en el municipio se han convertido para los habitantes de la colonia Rocío Villarreal en su peor enemigo, pues en consecuencia la Dirección de Desarrollo Social les negó hule y cartón, a pesar de las lluvias registradas en los últimos días.
Las precipitaciones pluviales dejaron un saldo negativo en la colonia Rocío Villarreal: calles sin pavimento inundadas, llenas de lodo, pero lo más grave es que algunas familias perdieron su único patrimonio: la casa de cartón.
Durante un recorrido realizado por El Siglo de Torreón en la colonia Rocío Villarreal, se observó cómo varias familias colocaban en los tendederos todo tipo de cartón para secar.
Y es que según Alejandra Pinedo, en la Dirección de Desarrollo Social les negaron hule y cartón: “Dijeron que por ser elecciones no nos podían dar, que toda la ayuda estaba suspendida, hasta los programas de materiales”.
Y añade: “por eso pusimos a secar el cartón, casi está hecho pedazos pero tenemos que hacer que vuelva a servir porque ya no nos van a dar por mucho tiempo”.
Alejandra señala que varias familias de la colonia Rocío Villarreal fueron severamente afectadas por las lluvias, pues el cartón no resistió la humedad y provocó que los pocos muebles con los que cuentan se echaran a perder.
“Nosotros no tenemos la culpa de que sean elecciones, mucha gente se tuvo que salir de sus casas mientras pasaba la lluvia porque era peor estar adentro, además nadie ha venido a prestar ayuda”.
Milagros Fernández asegura que una comisión de vecinos ha acudido una y otra vez la Dirección de Desarrollo Social para solicitar hule y cartón, pero nada, la respuesta siempre ha sido negativa.
“Ni siquiera por las lluvias nos quisieron dar tantito hule, mejor gente de las colonias ricas nos ayuda con despensas y material, pero las autoridades ni se acuerdan de nosotros, nada más cuando quieren que votemos, ahí sí vienen”.
A consecuencia de las lluvias registradas, según las vecinas de este sector, los menores de edad han enfermado de las vías respiratorias. Antes contaban con un dispensario médico, pero cuando la líder de la colonia se fue, nadie supo qué pasó con el medicamento y el consultorio construido también con cartón, nunca más volvió a funcionar.
“Deberían mandar otra vez a los pensionados, ellos venían a dar consulta para los niños y hasta traían medicina, pero no han regresado, si volvieran nos serviría de mucho”.