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Brasilia, Brasil.- El candidato oficialista José Serra y el populista Ciro Gomes mantienen una cerrada disputa por obtener un segundo lugar en los comicios del 6 de octubre y acompañar así al líder izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva en una segunda vuelta.
El escenario electoral delineado esta semana por la encuesta de la empresa Vox Populi marcó un empate técnico entre Serra y Gomes en el segundo lugar de las preferencias y confirmó el liderazgo del abanderado del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT).
Analistas locales consideran por este motivo que la próxima semana será clave para que comience a emerger la figura que acompañará a Lula da Silva en un posible segundo turno, en caso que ningún candidato obtenga mayoría en las elecciones del 6 de octubre.
Serra, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), obtuvo 19 por ciento de apoyo en el último sondeo, dos puntos porcentuales por encima de Gomes, del Partido Popular Socialista (PPS), mientras Lula da Silva tuvo un respaldo de 39 por ciento.
El estudio, realizado los días 10 y 11 de septiembre, confirmó que ninguno de los postulantes alcanzaría el 50 por ciento más uno de los votos válidos para ganar la Presidencia de Brasil en la primera vuelta, por lo que sería necesaria una segunda ronda.
El empate técnico en el que se encuentran Serra y Gomes los coloca frente a la mayor batalla política de la campaña, donde ambos intentarán arrancar votos del electorado para garantizar su presencia en el segundo turno, previsto para el 27 de octubre.
La estrategia de Gomes, definida el jueves pasado, fue buscar el apoyo de Lula da Silva en su férrea pelea contra el candidato oficialista y ex Ministro de Salud.
“El PT me atribuye la función de confrontar a Serra para que se quede ‘Lulita paz y amor’. Si este candidato del gobierno ahora cree que tendrá éxito, creo que vamos a ver pronto la destrucción del petista”, afirmó el abanderado del PPS.
Advirtió además al líder izquierdista que Serra prepara documentos para probar diversos errores de las administraciones estatales y municipales del PT, con lo que el oficialista buscará en los días siguientes desprestigiar la campaña de la izquierda.
La cúpula del PSDB, mientras tanto, considera que la batalla contra Gomes está ganada y que el siguiente blanco debe ser Lula da Silva, con miras a las elecciones del 6 de octubre.
Aunque Serra ha negado que vaya a adoptar una postura agresiva frente al abanderado petista, la postura fue marcada el mismo día que Vox Populi anunció sus resultados, cuando el oficialista apareció en un comercial preguntando: “Quién va a dar empleo, Lula o Serra”.
Mientras Serra y Gomes buscan obtener su pase al segundo turno, Lula da Silva mantendrá una campaña neutral hasta el final de la recta electoral, cuando más de 115 millones de brasileños acudan a las urnas a escoger a un nuevo jefe de Estado y un vicepresidente.