TORREÓN, COAH.- De seguir los mismos jefes policíacos tendremos que esperar 20 años y no diez, para tener una buena Policía Preventiva, declaró ayer Rogerio Manjarrez Clenow, presidente de la Federación de Cámaras Nacionales de Comercio (Fecanaco), tras arremeter duramente contra Juan Francisco Woo Favela y Jesús Jasso Fraire, a quienes responsabilizó del rezago y anarquía que prevalece en el renglón de Seguridad Pública.
Dijo que en vez de andar justificando su pobre labor, “mejor debería ponerse a trabajar Jesús Jasso Fraire, pues es una burla declarar que se dejan sentadas las bases para tener una buena policía pero hasta dentro de 10 años, cuando lo que importa es el aquí y el ahora, sobre todo considerando que gracias a la figura del Fideicomiso de Seguridad Pública que integra tanto el Gobierno del Estado como el Municipio, se han canalizado importantes recursos económicos”.
Y explicó que el rezago en seguridad pública es porque faltó rumbo, directrices y porque se desperdició la capacidad de muchos elementos policíacos de experiencia que no podían hacer un mejor trabajo si es que no tenían las instrucciones precisas para hacerlo.
En la Dirección de Seguridad Pública ni los mandos medios y tampoco los jefes policíacos trabajaron en forma unida y la anarquía se dio porque hasta en el manejo de las patrullas existió un gran desorden.
Hacen lo que les da la gana
Rogerio Manjarrez, quien es a su vez integrante del Fideicomiso de Seguridad Pública, organismo que existe desde 1995 y maneja aportaciones económicas del Gobierno del Estado y del Municipio, dijo que hay otra situación que se debe enfrentar y se refiere a las patrullas adquiridas con recursos de este esquema.
En tan mal estado se encuentran las unidades de la DSPM que “tendremos que recibir, previa auditoría, de todo el parque vehicular y el armamento adquirido con recursos del Fideicomiso’’.
Este año se ejerció, mediante este esquema, la suma de 25 millones de pesos, 15 del Municipio y 10 del Gobierno del Estado y con esos dineros se apoyó incluso el equipamiento del nuevo edificio de Seguridad Pública construido al oriente de la ciudad.
Insistió que es un verdadero desorden el que prevalece en la corporación policíaca, porque ni los mandos medios ni los jefes policíacos han logrado controlar el uso de las patrullas que ya operan sin bitácora, sin resguardantes, las trabajan hasta 24 horas y desde hace mucho tiempo dejaron de respetarse los lineamientos que marca el reglamento de operación del Fideicomiso de Seguridad Pública.
Desde su perspectiva, es una burla la postura asumida por el director de Seguridad Pública, Jesús Jasso Fraire, cuando nunca, como estos últimos años, se ha invertido en la corporación policíaca en profesionalización, capacitación, armamento, uniformes, equipo de protección y patrullas, todo lo que ya quisieran otros que trabajan con las uñas.