México, D.F.- La austeridad fiscal pregonada por el Ejecutivo no llegará a las cámaras de Senadores y de Diputados, las cuales para el 2003 ya solicitaron un incremento real en su presupuesto de 10.4 por ciento, lo que equivale a 640.5 millones de pesos adicionales.
Según consta en el Proyecto de Presupuesto de Egresos del 2003, los diputados requieren 3 mil 276 millones de pesos para sus gastos, lo que representa un aumento real de 7 por ciento con relación al monto aprobado para el 2002.
Por su parte, los Senadores propusieron ejercer durante el año entrante un gasto de mil 712 millones de pesos, monto 18.3 por ciento superior en términos reales al autorizar este año.
Según la Ley de Contabilidad y Gasto Público, la Cámara de Diputados y la de Senadores, ambas son órganos autónomos en el planteamiento de sus ingresos y gastos.
Esto les permite formular cada año sus respectivos proyectos de presupuesto y enviarlos oportunamente al Presidente de la República, para que éste ordene su incorporación al proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación.
Así, los presupuestos del aparato legislativo y otros órganos autónomos no requieren la previa aprobación de ningún organismo.
A su vez, el Poder legislativo aprueba y en algunos casos modifica el Proyecto en el que están incluidas sus propias peticiones.
La Auditoría Fiscal de la Federación, encargada de verificar cada año la cuenta de la hacienda pública. Dicho organismo solicitó un gasto de 620 millones de pesos para el 2003, equivalente a un incremento de 8.9 por ciento real.
En conjunto el presupuesto del poder legislativo sumará 5 mil 608.4 millones de pesos, de los cuales el 58 por ciento será para el pago de nómina.
También es notable el incremento de gasto que solicita el poder Judicial, que se compone por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Consejo de la Judicatura Federal, la Sala Superior y las Salas Regionales.