Torreón, Coah.- La danza contemporánea simplemente lo deslumbró. Aarón Alberto Rivera tiene 34 años, es originario de Gómez Palacio y dedica su vida al baile.
Su primer acercamiento con el arte fue la pantomima. Aarón hacía funciones en las calles, en las plazas públicas de la Comarca Lagunera. Posteriormente desarrolló una inquietud actoral. Por este motivo comenzó a estudiar teatro con los maestros Rogelio Luévano Correa y Nora Amalia Manneck por 4 años.
Aarón no se sentía conforme con su preparación, por este motivo viajó a la ciudad de México para estudiar danza contemporánea.
?Pagué todos mis gastos, me prometieron un apoyo económico que nunca llegó?, recuerda el bailarín.
Aarón regresó a la Laguna, actualmente es integrante de la compañía ?Mequite Danza Contemporánea del Noreste?, que dirige el maestro Jaime Hinojosa.
Entre los logros de Aarón está haber ganado el premio como Mejor Interpretación Masculina en el Tercer Concurso Interestatal de Coreografía.
Otras inquietudes artísticas de Aarón son la fotografía, el teatro. Padre de familia se dedica al oficio de la carpintería.
Aarón trabaja en la Universidad La Salle Laguna (ULSA) como modelo de figura humana, ?mi logro es estar en el constante trabajo aquí en el centro de danza y tener la oportunidad de crear?.
Una de las musas que inspiran su trabajo es Victoria, su pequeña hija de 7 años, ?es mi mayor logro?, comenta con inmensa alegría.
Aarón tiene el apoyo de 2 becas. Una de parte del gobierno de Coahuila por desarrollo artístico individual, y en el Estado de Durango en la categoría de continuar sus estudios en una institución de educación artística.
Su nuevo proyecto es una función de danza para niños, espera terminar el montaje para principios de enero de 2003.
El cine es una unión
de imagen y música
El cine es el matrimonio de sus dos amores: música e imagen. Carlos Sáenz Peña tiene 24 años, es comunicólogo y desea dedicar su vida al séptimo arte. ?Es lo que me encanta y quiero hacer?
Su gusto por el cine apareció en la infancia, aunque modificó su concepción con el acercamiento a las producciones de directores independientes.
?Antes sólo veía las imágenes y no representaban nada. Después descubrí que cada plano tiene un porqué, una justificación y una expresividad. Ahí me enamoré del cine?, asegura Carlos.
Para él, las imágenes en movimiento son muy poderosas, pues afectan a los espectadores en su percepción de la realidad: ?manipula o hace pensar a la gente?, dice.
Carlos eligió la carrera de Comunicación, por ser lo más cercano al cine. Sin embargo, planea en un año estudiar cinematografía en Canadá o en la ciudad de Londres.
?Hoy sí, mañana no? fue su primer cortometraje realizado hace cinco años en la universidad, actualmente cuenta con siete producciones.
Los gastos de realización son solventados por él, o con ayuda de amigos y familiares.
?Nunca he solicitado apoyo a instituciones, porque sería comprometer mi trabajo?.
Considera que sus cortometrajes nacen del deseo de ver una secuencia que trae en su mente. ?Es como un capricho, lo hago para mí, por el placer que me provoca?.
A pesar de lo sencillo que parece realizar un cortometraje, Carlos no lo cree así y afirma que aún le falta mucho por aprender, experimentar y filmar para sentirse satisfecho.