TORREÓN, COAH.- Ante la proximidad de la temporada decembrina, poco a poco se satura nuevamente de vendedores ambulantes el centro de la ciudad, principalmente a lo largo de la avenida Hidalgo y lo anterior contradice a las autoridades municipales en el sentido de que no se permitirán nuevos asentamientos de vendedores en el primer cuadro.
Durante un recorrido que se hizo por el llamado Centro Histórico y algunas de las calles aledañas, se observó que en una sola cuadra de la avenida Hidalgo, entre las calles Valdez Carrillo y Cepeda, se instalan ya 20 puestos semifijos de todo tipo de mercancía; 13 sobre la acera sur y 7 más en la banqueta de la parte norte.
Independientemente del número de vendedores semifijos, se pudo observar que la mayor parte de ellos han colocado a los lados de sus improvisados comercios, algunas extensiones con exhibidores, cajas y estantes adicionales que hacen crecer sus espacios hasta el doble, dificultando con ello hasta el libre tráfico de peatones, ya no se diga el poder llegar a los comercios establecidos.
La concentración de los comerciantes ambulantes se observa a lo largo de la Hidalgo, desde la calle Treviño hasta la Múzquiz y conforme se acerca diciembre, el número de puestos va en aumento, lo que se hace muy evidente y molesto para los transeúntes.
Algunos vendedores llegan hasta con sus sillas y las colocan en medio de la banqueta, sin importarles estorbar el paso de las personas, lo que genera molestias e inconformidad ante la indiferencia de las autoridades municipales.
Es muy variada la mercancía que ofrece este tipo de vendedores y va desde objetos para el pelo, peinetas, moños, “piojitos”, discos compactos y casetes “piratas”, algunos aparatos electrónicos, gorditas, frutas, aguas frescas, mercería, relojes, pilas y hasta veneno para cucarachas.
Presionadas por la Cámara de Comercio, las autoridades municipales han hecho varios intentos para reubicar los puestos e incluso se abrieron tianguis como La Pulga, frente a la Alameda y otro sobre la avenida Juárez, donde funcionó por muchos años la Ferretera de La Laguna, pero de nada ha servido, ya que vuelven a surgir otros más.
Buenos ingresos
De acuerdo a datos que en ocasiones anteriores ha dado a conocer el Departamento de Plazas y Mercados, son apenas 800 los vendedores ambulantes que se tienen en el primer cuadro, pero en la Cámara de Comercio, se indica que el número de personas que se dedica al comercio informal en el centro de Torreón oscila entre los mil quinientos y mil seiscientos.
También hay el temor en la Canaco de que en esta próxima época navideña se vaya a saturar el primer cuadro con comerciantes que disfruten de permisos especiales por la temporada, como se hace cada año y ello sería en perjuicio de los comerciantes que sí pagan renta de sus locales, salarios, impuestos, agua luz y Seguro Social, lo que no hacen los comerciantes informales.
La instalación de vendedores ambulantes resulta muy redituable para la Tesorería Municipal, pues de acuerdo a los comentarios de algunos ambulantes, empleados de Plazas y Mercados cobran 12.50 pesos diariamente a cada vendedor, de tal suerte que si en un día se instalan mil en toda la ciudad, son 12 mil 500 pesos, lo que al mes representa 375 mil pesos, de ahí que ésta puede ser una de las causas por las que no se pone mucho énfasis en retirar a los ambulantes, ya que sería una captación importante que dejaría de tener el Municipio.