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México, D.F.- La violencia que se presentó en el Congreso demuestra la fragilidad y vulnerabilidad en que se encuentran los diputados y en general el Poder Legislativo, expresaron diputados locales.
Lamentaron también la lentitud con que actuaron los cuerpos de seguridad de la ciudad y advirtieron que eso puede sentar un mal precedente en el futuro.
Exigieron que se aplique la ley y se castigue penalmente a quienes irrumpieron en el recinto de San Lázaro.
Jaime Guerrero, coordinador de Democracia Social, señaló que nada justifica la violencia con que entraron a la Cámara de Diputados diferentes grupos sociales, pero lo más grave es la lentitud con que actuó la policía; por lo que sugirió investigar al respecto.
Señaló que ningún grupo social, por más enojado que esté, tiene derecho a dañar el patrimonio de una nación, por lo que dijo se deberá proceder legalmente contra quienes participaron en los hechos, “no hacerlo sería lamentable” y no ayudaría al Estado de Derecho.
Miguel González Compeán, del Revolucionario Institucional (PRI), consideró que el hecho del martes es gravísimo. “Si bien todo mundo tiene derecho a manifestarse, la forma en que se hizo es inaceptable.
Reprochó al jefe de gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, y al titular de la Secretaría de Seguridad Pública local, Marcelo Ebrard, no haber actuado oportunamente debido a que le preocupa más su popularidad.
No obstante, dijo que ahora se debe proceder penalmente, pues de lo contrario se corre el riesgo de que esas situaciones se repitan.
Ernesto Herrera, de Acción Nacional (PAN), expresó que la irrupción al Congreso “deja de manifiesto la vulnerabilidad del Poder Legislativo” y da una muy mala imagen de la ciudad y del país.
Coincidió con otros legisladores en que se debe denunciar y aplicar mano dura contra quien haya promovido los ataques, porque “nadie puede estar por encima de la ley”.
En tanto, el perredista Gilberto Ensástiga dijo que la situación del martes es delicada, por lo que hizo un llamado a actuar en las instancias correspondientes y legales para resolver las diferencias.
Advirtió que si el gobierno federal no atiende las demandas de maestros y barzonistas, el año próximo se puede tener una crisis social se verá.
No obstante, insistió en que nada justifica la violencia, mucho menos a un recinto legislativo.