Buscan conexión entre el valle y zona protegida
TORREÓN, COAH.- Reconocidas instituciones a nivel nacional realizan estudios en el Valle de Cuatrociénegas para determinar si hay interconexión entre el valle con la zona natural protegida, declaró Ignacio Corona Rodríguez, delegado estatal de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
En relación al polémico caso de siembra de forrajes en el municipio de Cuatrociénegas, por parte de productores lecheros de la Región Lagunera, en el cual se habla de daños a la zona natural protegida por las autoridades ambientales, el funcionario dio a conocer que el titular de la Semarnat, junto con otros funcionarios federales, se reunieron con los tres propietarios de las empresas que perforaron pozos para el riego de los cultivos.
Los productores, dijo, solicitaron a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente –Profepa- que les permitieran aprovechar 1,400 hectáreas que tenían listas para cosecha, pero se les indicó que primero deben elaborar un programa de rescate del suelo y en segundo lugar que no se extrajeran más de 20 millones de metros cúbicos, puesto que esa es la recarga natural que tiene el valle.
La tercera medida y última es que el estudio realizado por el despacho privado Lesser y Asociados -el cual concluye que no están interconectados los dos valles-, fuera avalado por el Instituto de Ecología de la UNAM, por el Instituto Nacional de Ecología y por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua.
Explicó que sólo dos empresas aceptaron las medidas; El Pilar y Santa Mónica, pero el propietario de Santa Teresa decidió ampararse ante un juez que resolvió otorgarle el amparo y pudo reiniciar los trabajos, aunque el procedimiento legal sigue su curso.
Lo importante, consideró el funcionario, es que se dejó el mensaje claro y falta que las instituciones determinen si los valles están interconectados o no. En el primer caso, dijo, se van a tener que cerrar definitivamente los pozos para no poner en riesgo el área natural protegida.
Destacó finalmente que lo trascendente es el aval de instituciones como la UNAM, así como de ambientalistas reconocidas y cuyo resultado será determinante para la toma de decisiones que habrán de tomar las autoridades.