Mob Ster, famoso gangster, recibió la visita de su abogado. "-Te tengo dos noticias, Mob -le dice el jurisperito-; una buena y una mala. ¿Cuál quieres primero?". "-La mala" -pide el hampón al tiempo que jugueteaba lanzando al aire una moneda, como George Raft en "Scarface" (1932). "-Tú y yo sabemos -dice el abogado- que anoche mataste a Johnny The Rat. Pero él te hirió con su navaja, y quedó tu sangre en la escena del crimen. Sangre tuya en las manos y ropa de la víctima; sangre tuya en el suelo, en las paredes, en todas partes. El FBI recogió muestras de tu sangre, la hizo analizar, y te tiene ya bien identificado. En un par de horas te detendrán. El fiscal pedirá para ti pena de muerte. Será milagro si consigo una sentencia de cadena perpetua". "-¡Oh! -exclama consternado el gangster, que en tratándose de interjecciones tendía más bien a lo lacónico-. Y ¿cuál es la buena noticia?". Contesta el abogado: "-Cero colesterol"... Las derechas son muy dogmáticas, es cierto, pero las izquierdas más. Ni mis cuatro lectores y yo juntos podríamos quitarle a un izquierdista su admiración por Castro, y ni con hacha le entraría la idea de que el añoso Comandante es un tirano, un dictador que ha arrebatado a los cubanos todo derecho y toda libertad. Igual, entre nosotros los izquierdosos siguen considerando a Marcos el epítome de la heroicidad, y anuncian la revolución tras de que la Suprema Corte rechazó los alegatos interpuestos contra la legislación en materia indígena aprobada por el Congreso. Cuidado, digo yo, con los hombres aún armados de Chiapas. De la violencia de las armas a la violencia terrorista no hay una gran distancia. Y esa violencia, la del terrorismo, se aprende fácilmente por imitación. Modelos no faltan en el mundo, ni hay país que esté vacunado contra el mal. Ojalá lo que digo sea exageración. Pero... ¡Insensato! ¡Con ese "Pero..." pusiste un estremecimiento en la República! Anda, relata algunos de tus inanes chascarrillos para sedar a la Nación y hacer que vuelva a la tranquilidad... Llegaba el tiempo de las elecciones, y la autoridad electoral estaba escogiendo por sorteo a quienes se harían cargo de las casillas. Le cuenta un tipo a otro: "-A mi mujer la insacularon". "-¡Qué barbaridad! -profiere el otro-. ¿Y ya pusieron la denuncia?"... Empédocles Etílez llegó tarde a su trabajo. Iba alumbrado. Le dice el capataz: "-Vienes medio -edo". Responde a manera de explicación el temulento: "-Es que gano poco"... Había baile de disfraces en el casino de la ciudad. Llegó al sarao una mujer cuya visión dejó estupefactos a quienes estaban en la puerta: estaba completamente en peletier -quiero decir desnuda- y con el cuerpo pintado de blanco de la cabeza a los pies. "-¿Qué significa esto, señora? -le pregunta uno de los ujieres-. ¿A qué esa desnudez?". Responde la mujer: "-Vengo disfrazada de muela". Y si más procede a entrar. La mira por atrás el de la puerta y le dice: "-Picada, ¿verdad?"... El joven curita estaba confesando. Llega al confesionario una guapa muchacha curvilínea. "-Me acuso, padre -dice con acento contrito- de que tengo relaciones con el cura de la parroquia vecina. ¿Incurro en falta grave?". "-Gravísima -le indica el curita con severidad-. Ésta es tu parroquia"... Murió el marido, y su señora quedó joven y de muy buen ver. Su vida se volvió muy agitada. Después de algunos años ella murió también. En la tumba, conforme a su última voluntad, se puso una inscripción: "Al fin juntos". Comentó alguien que la había conocido: "-Seguramente se refiere a sus muslos"... FIN.