El borrachito iba manejando desatentadamente, y no hizo caso del semáforo. Lo detuvo un oficial de tránsito. "-¿Qué pasó con el rojo, amigo?" -le pregunta. "-Lo cambié por este amarillito" -contesta el borrachín. "-No se haga el chistoso -se molesta el de la moto-. ¿No vio el semáforo?". "-Sí lo vi -confiesa el ebrio-. Al que no te vi fue a ti". "-A ver -solicita el agente-. Los papeles". "-Papeles los que estamos haciendo aquí, interrumpiendo el tránsito" -dice el borrachito. "-Quiero decir que me enseñe sus documentos" -insiste el oficial. "-¿De cuáles quieres? -pregunta el tipo echando mano a la cartera-. Traigo letras de cambio y pagarés". "-Mire -se enoja ya el oficial-. Le voy a quitar la placa". "-¡No la friegues! -suplica el borrachín apretando la boca-. Ahorita la necesito mucho; voy a una carne asada!". "-Me está usted cansando la paciencia -se irrita el oficial-. Lo voy a llevar al bote". "-Bueno -acepta el intoxicado conductor-. Pero tú remas". "-Acompáñeme" -exige entonces el hombre-. "-¡Uh! -protesta el borrachín-. Ni guitarra traigo, manito". El oficial, al ver en tan mal estado al borrachito, se compadece de él y decide llevarlo a su casa. Cuando llegan, el borrachín hace inútiles esfuerzos por meter la llave. Después de varios inútiles esfuerzos la entrega al oficial para que le abra él. "-Oiga -dice éste-. Lo que me dio es un supositorio". "-¡Ah carajo! -se alarma el borrachín-. ¿Entonces dónde puse la llave?"... El muchacho que estudiaba en la universidad iba a salir en una obra de teatro. Representaría el papel de un lord inglés. Le puso un mensaje a su papá: "Necesito dinero para comprar monóculo". De inmediato responde el señor: "Arréglatelas tú solo. A tu edad yo siempre conseguí eso de gratis"... Las dos guapas chicas platicaban acerca de sus vacaciones. Una iría a la playa; la otra a esquiar. "-A mí me gusta más Cancún que Aspen" -dice la primera. "-¿Por qué?" -pregunta la amiga-. Explica aquélla: "-Porque en Aspen casi siempre estás bajo cero, y en cambio en Cancún siempre acabas bajo uno"... Dos cazadores aficionados salieron con sus escopetas. Se separaron para buscar la caza, pero a poco llega uno muy pálido y dice al otro: "-Compadre, acabo de matar un león". "-¿Cómo es eso, compadre? -se sorprende el amigo-. Aquí no hay leones". "-Sí hay -dice azorado el otro-. El que me eché trae escudito en la solapa y credencial del club"... El fornido y musculoso individuo le gritaba con indignación al asustado tipo que estaba escondido abajo de la cama: "-¡Cobarde! ¡Canalla! ¡No se esconda! ¡Salga inmediatamente de ahí!". Y dice tímidamente el otro desde abajo: "-Le recuerdo, caballero, que ésta es mi cama y que la señora es mi mujer"... Llega la muchachita a su casa y anuncia con gran tristeza a sus papás: "-Ya no soy virgen". "-¡¡¡Queeeé!!!" -se espantan el señor y la señora. "-Sí -confirma la niñita-. Ahora voy a salir de ángel en la pastorela del colegio"... Don Gerolacio, señor de edad madura, casó con mujer joven. La noche de bodas ella le dice con desilusión: "-Oye: esto está blando". "-¿Ah, sí? -pregunta Gerolacio fingiendo inocencia-. Y ¿qué dice?"... (No le entendí)... FIN.