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NACIONES UNIDAS, EU.- El jefe de inspectores de armas de las Naciones Unidas, Hans Blix, descartó el regreso de sus equipos a Iraq antes de una resolución al respecto del Consejo de Seguridad, una condición exigida por Estados Unidos.
Blix presentó la noche del miércoles al Consejo su evaluación de dos cartas que Bagdad le envió la semana pasada en seguimiento a sus reuniones de principios de mes en Viena, Austria.
Si bien dijo que hay "una gran área de entendimiento común" con el gobierno iraquí sobre los detalles de las inspecciones, también señaló que Bagdad no había confirmado todos los acuerdos a los que él creía haber llegado con los funcionarios iraquíes en Viena.
Además, indicó que Iraq no había aceptado permitir a los inspectores abrir oficinas regionales. "Lo que estamos esperando ahora realmente no son más clarificaciones de Iraq, que sería bueno tener, sino más bien una nueva resolución del Consejo de Seguridad", declaró.
Iraq ha ofrecido recibir una misión de avanzada de inspectores el 19 de octubre próximo, pero Blix consideró "altamente improbable" que esa fecha se mantenga. Añadió que tal equipo probablemente pueda desplazarse unos 10 días después de que una resolución sea adoptada.
Washington se opone al envío de cualquier equipo antes del voto del Consejo, alegando que sin condiciones estrictas se repetiría lo ocurrido la década pasada, cuando los inspectores se retiraron en 1998, tras ser acusados por Bagdad de realizar labores de espionaje.
El funcionario del organismo internacional dio su reporte mientras los miembros permanentes del Consejo de Seguridad siguen divididos en cuanto a los términos y objetivos de la resolución que ha de ser aprobada.
Mientras Estados Unidos y Reino Unido buscan un ultimátum, Francia, China y Rusia quieren dar a Iraq la oportunidad de cooperar primero.
Francia propone una solución en dos etapas, con un voto sobre el uso de la fuerza con base en el resultado de las inspecciones, mientras Washington busca una sola resolución que autorice la acción militar si Iraq se niega a cooperar plenamente con los expertos.