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TOLUCA, MÉX.- El estratega uruguayo de Diablos Rojos de Toluca, Wilson Graniolatti, dijo que desconocía por completo la propuesta del presidente del equipo escarlata, Rafael Lebrija, en relación a que quería que Ricardo Lavolpe dirigiera los partidos de Liguilla.
Entrevistado en el Estadio Nemesio Díez al término de la práctica del cuadro mexiquense, un día después que cayeron 2-1 ante Chivas del Guadalajara en el encuentro de ida de cuartos de final, Graniolatti señaló que no sabía nada de que Lebrija quiere al estratega argentino para que dirija los partidos de Liguilla.
"La verdad no he hablado con él (Lebrija), me sorprende porque él dijo que lo más lógico era que Ricardo Lavolpe se fuera de inmediato a la Selección, incluso yo era partidario de eso, y me extraña lo que me comentan", aseguró Graniolatti.
Cuestionado sobre qué efectos tendría esta medida, en caso de que Lavolpe regrese al banco de Diablos Rojos para el partido de vuelta frente al Guadalajara mañana sábado, Graniolatti indicó que si es una medida que Lebrija considera conveniente él no se opondría.
"Si el presidente lo considera conveniente no hay ningún problema", estableció Graniolatti, quien tomó las riendas del cuadro mexiquense en la fecha 17 del Campeonato Apertura 2002.
En lo que respecta a la derrota que sufrió el equipo 2-1 ante Guadalajara, el técnico "charrúa" dijo que "no era lo esperado, aunque tampoco lo fueron esos últimos minutos donde se perdió el resultado, errores, virtudes o jugadas circunstanciales, pero esperamos darle la vuelta el sábado".
En cuanto a las fallas del equipo que costaron la derrota, en tono molesto apuntó que esa es tarea de los medios y que en lo personal no vio nada malo en el accionar de su escuadra.
"Antes del partido todos son unos fenómenos, pero tras la derrota vienen las preguntas, eso le corresponde a ustedes (la prensa), yo no vi ningún problema en el equipo", aseguró.
Con respecto a la salida del paraguayo José Saturnino Cardozo en los minutos finales del encuentro, con lo que se quedó sin hombres al frente, Graniolatti dijo que el atacante "guaraní" le había pedido el cambio, "porque ya no podía más".