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Tijuana, Baja California.- Un “narcotúnel” se habría descubierto ayer por la mañana en la delegación Mesa de Otay de Tijuana ubicada a 100 metros de la línea limítrofe con Estados Unidos.
Pese al hermetismo de autoridades policiacas, trascendió que el pasadizo concluye en una bodega de Estados Unidos y sería utilizado para transportar drogas e indocumentados.
La intensa movilización de agentes de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra la Salud (FEADS), de la Agencia Federal de Investigación (AFI) y personal del consulado y de la Secretaría de Relaciones Exteriores provocó especulaciones.
De acuerdo con versiones extraoficiales, los funcionarios arribaron con equipo de Rayos X con el que se cree se trataría de ubicar la ruta de este presunto narcotúnel.
Hasta el momento no se ha localizado a los propietarios del inmueble ubicado en la calle Carlos Chávez del módulo tres de la delegación Mesa de Otay, localizado a unos 100 metros de la barda fronteriza.
De acuerdo con vecinos, la construcción inició en junio de este año. A partir de esa fecha se levantó una barda de madera que impedía ver el tipo de construcción.
María de la Luz Castellanos, vecina del lugar, relató que la madrugada del domingo pasado observó que a las seis de la mañana llegó un estadounidense para hablar con el velador del inmueble, se retiraron juntos y desde entonces no se les volvió a ver.
Antes había unos cuartuchos donde se refugiaban malvivientes, donde incluso, se drogaban.
Este sería el segundo pasadizo que se ubica durante el año. El 27 de febrero, luego de casi un mes de investigaciones, elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) descubrieron un “narcotúnel” de 1.5 kilómetros de longitud, ubicado entre Tecate y San Diego.
El pasadizo era utilizado para transportar droga de México a Estados Unidos.
Y en 1993 la Procuraduría General de la República (PGR) localizó un “narcotúnel” en la delegación de Otay, el cual se atribuyó al cártel de los hermanos Arellano Félix.