Reuters
JERUSALÉN.- Israel reforzó su presencia en la ciudad cisjordana de Jenin ayer en busca de activistas palestinos responsables de ataques suicidas, mientras Estados Unidos ponía fin a la misión de su enviado a la región.
El ejército israelí dijo que había detenido a seis palestinos en Jenin y sus alrededores.
Cientos de tropas respaldadas por vehículos pesados entraron en Jenin el viernes, practicando registros en casas y edificios e imponiendo toques de queda.
La acción del ejército generó una respuesta armada de los palestinos y en el frente diplomático, críticas de la Unión Europea, que instó a Israel a la moderación.
Oficiales de alto rango del ejército israelí dijeron que la operación en Jenin —denominada “Vanguardia”— duraría lo que fuera necesario para atrapar a los activistas palestinos que defienden la insurrección en pro de la independencia mediante actos suicidas con bombas como el que mató a 14 israelíes el lunes.
Médicos palestinos dijeron que seis personas fueron heridas de gravedad como consecuencia de enfrentamientos con el ejército, en actos de violencia que ensombrecieron la visita de dos días a Israel y a los territorios palestinos del enviado estadounidense, William Burns.
Burns llegó a la zona con una “guía” para la paz basada en el discurso sobre la política en Oriente Medio pronunciado en junio por el presidente George W. Bush, quien ha buscado disminuir las tensiones entre israelíes y palestinos mientras Washington se prepara para una posible guerra contra Iraq.
El plan de Estados Unidos propone el fin de la violencia y reformas en la administración palestina, así como la retirada de las ciudades ocupadas por parte de Israel, que llevarían al establecimiento de un estado palestino en Cisjordania y la Franja de Gaza para el 2005.
Los dirigentes israelíes dijeron que el plan —elaborado por el “cuarteto” mediador formado por Estados Unidos, Rusia, Unión Europa y la ONU— carecía de garantías de seguridad. Los palestinos dijeron que necesitaba incluir cronogramas y mecanismos de ejecución.
Cauteloso
El secretario del gabinete israelí, Gideon Saar, quien describió el plan como un proyecto de propuesta, dijo a Radio Israel que éste “se desviaba en algunas partes de la idea general del discurso del presidente (Bush)”.
Saar, que no ofreció detalles, dijo que Israel le expresó sus reservas a Burns y que le enviaría a Washington una respuesta escrita a la propuesta. No hubo disculpas tras la incursión en Jenin.
“Jenin se ha convertido en la capital del terror”, dijo el ministro de Defensa israelí, Binyamin Ben-Eliezer. “Cuando hablo de las mujeres y hombres suicidas, es de aquí de donde vienen.” Los palestinos censuraron la operación inmediatamente. Nabil Abu Rdainah, asesor del presidente palestino Yasser Arafat, dijo que Israel había “saboteado los esfuerzos de Estados Unidos con respecto al plan guía (para la paz)”.
La Unión Europea calificó la ofensiva en Jenin de “paso atrás” e instó a Israel a retirar sus tropas de la ciudad y a mostrar mayor moderación en su búsqueda de militantes.
El asalto a Jenin fue una de las mayores operaciones en Cisjordania desde que las fuerzas israelíes reocuparon la mayor parte de sus ciudades en junio, luego de varios ataques suicidas que causaron la muerte a 26 personas en Israel.
Jenin fue escenario de algunos de los enfrentamientos más encarnizados durante una ofensiva israelí previa, en abril, después que 29 personas murieron en un atentado suicida en un restaurante de un hotel israelí.
Al menos 1,629 palestinos y 618 israelíes han perdido la vida desde el inicio de la última insurrección palestina, en septiembre del 2000.