SALTILLO, Coah.-- La Diócesis de Saltillo denunció ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, “las constantes agresiones sistemáticas criminales cometidas contra los migrantes (centroamericanos); sobre todo de parte de la empresa de seguridad que presta sus servicios a Transportadora Ferroviaria Mexicana (TFM), en Saltillo”, en vísperas de la conmemoración de la declaración universal de los derechos humanos, que se celebra el próximo martes 10 de este mes.
Esto fue informado por el coordinador de la Pastoral Migratoria de la Diócesis, Pedro Pantoja; y la asesora Patricia Hernández, quienes presentaron dicha denuncia ante el presidente de la CNDH, José Luis Soberanes, y en especial demandaron castigar el asesinato del hondureño Ismael de Jesús Martínez, muerto a pedradas la semana pasada por guardias que vigilan los trenes de TFM.
En su queja, los denunciantes expusieron ante la CNDH que el jueves de la semana pasada fueron agredidos dos hondureños que viajaban clandestinamente en el ferrocarril rumbo a los Estados Unidos, por vigilantes de la empresa Canina, S.A de C.V., que sirve a TFM. Los guardias privados los bajaron a pedradas, matando a uno de ellos a quien le fracturaron el cráneo.
Además, expusieron que de forma sistemática los centroamericanos que viajan en el tren son agredidos, robados, humillados y hasta asesinados por los vigilantes de la citada empresa de vigilancia privada y de otras como Eulen.
“Existen gravísimas sospechas de que estas empresas reciben apoyo logístico de empresas extranjeras; concretamente de agentes norteamericanos”, expusieron los quejosos.
Asimismo, pidieron que la CNDH demande la investigación, aclaración y castigo de las agresiones y crímenes que desde hace años se cometen contra los migrantes centroamericanos, y especialmente desde mayo de 2002 cuando fueron asesinados a balazos otros dos migrantes hondureños, cerca de las vías del ferrocarril en Saltillo.