Reportajes

Diputados, un buen negocio

Por Luis Guillermo Hernández Aranda y Pedro Vázquez

Torreón, Coah.-El trabajo de los 32 diputados en el estado resultó demasiado caro. Tres años para aprobar 43 leyes significó una erogación de 70 millones 688 mil 45 pesos. Es decir, cada ley costó a los ciudadanos un millón 643 mil 908 pesos.

El 31 de diciembre finalizan los trabajos de la Quincuagésima Quinta Legislatura. Para los representantes del pueblo el balance es positivo; para los empresarios existen grandes rezagos y en términos de productividad no se justifican los altos sueldos, mucho menos el famoso ?bono de marcha?, prestación que no está contemplada en la ley, tampoco en el presupuesto del Congreso del Estado, pero que los legisladores se otorgaron como una especie de ?liquidación? y que representa una cantidad de 145 mil pesos.

Mientras que la mayoría de la población recibirá un aguinaldo cercano a los mil 200 pesos, los legisladores percibirán por este concepto 73 mil 283 pesos. Tan sólo en el mes de diciembre cada diputado se llevará a la bolsa cerca de 271 mil 905 pesos, entre sueldo, aguinaldo y el ya mencionado bono de marcha.

En el tintero quedaron pendientes por aprobar las leyes de Transparencia, Comisión de Arbitraje Médico, del Notariado, la Ley de Aguas, entre otras. Tres años no fue tiempo suficiente.

?Es una inversión que la sociedad no ve fructificada en leyes que promuevan el desarrollo?, dice Arturo Gallegos, presidente del Consejo Empresarial de la Laguna (Coparmex).

Juan Manuel Alanís, Gerente de la Cámara Nacional de Comercio de Torreón, comenta que muchos empresarios desempeñan cargos de representación en diferentes organismos sin recibir ningún sueldo.

?Para nosotros una diputación que se ha buscado no debe ser un botín económico. Debe ser una representación legítima de los intereses de la sociedad. El día que lo logremos y no tengamos el concepto de busca chambas estaremos mejor?.

Los altos sueldos

El Congreso del Estado de Coahuila inició los trabajos de la Quincuagésima Quinta Legislatura a partir del primero de enero del 2000. En ese año los diputados percibían mensualmente 48 mil 300 pesos. Al finalizar el periodo, el sueldo aumentó a 53 mil 622 pesos. Esto sin contar el ingreso por concepto de viáticos a que tienen derecho. Por sesión cada diputado recibe 500 pesos independientemente de residir en Saltillo. Los legisladores foráneos reciben además 900 pesos. Aproximadamente son cuatro sesiones por mes, un diputado que no viva en la capital del estado recibe casi cinco mil pesos aparte de su salario.

Francisco Ibarra, Coordinador de la Fracción Parlamentaria del PRD, comenta que los altos sueldos se justifican plenamente.

?Por ejemplo nosotros otorgamos el 15 por ciento al partido, otro tanto a nuestras labores legislativas, de manera que nos quedamos con la mitad de nuestro salario y bueno... se justifica plenamente ese salario. Sin embargo, no se justifica en el caso de algunos diputados que simplemente vienen a levantar el dedo y que no son representantes reales de la sociedad?.

Juan Manuel Alanís no comparte la opinión del diputado, afirma que los altos sueldos no tienen justificación debido a que dejan un rezago legislativo importante, además de que todavía predominan intereses partidistas y no los del pueblo.

?Si hay una situación de crisis económica en muchas de las empresas del país, ¿porqué la Secretaría de Hacienda continúa desviando recursos captados en gran parte para estos sueldos? Hacienda está constantemente sobre las empresas e industrias, sobre todo lo que representa el aparato productivo del país, tratando de explotar, por así decirlo, la economía de las empresas en aras de un gasto que hoy por hoy no se justifica?.

Arturo Gallegos comenta que sería muy interesante definir cuál es la función del puesto de diputado. De esta manera sería posible ver cuánto cumplió.

?En la medida de su productividad se les debe pagar?.

Francisco Jaime Acosta, Coordinador de la Fracción Parlamentaria del PAN, rechaza la propuesta del sector empresarial y afirma que el trabajo de los diputados es incomprendido.

?No se puede ni se debe medir los resultados, ni el trabajo en general de los diputados, bajo los parámetros de una empresa de costo-producción. No se trata de pagarle a un diputado por su trabajo a destajo porque se trata de calidad y no de cantidad?.

?Aquí el trabajo y sus resultados son cualitativos. Es más sutil, intangible, es más difícil medirlo. Entonces es necesario buscar los mecanismos justos, válidos y acordes a su función para evaluar el trabajo de un legislador, que nos permita decir: tú fuiste un buen o mal diputado?.

Arturo Gallegos afirma que la mitad de los mexicanos viven con menos del salario mínimo, ?no se vale esos incrementos de salario, falta mayor sensibilidad en los políticos?.

En tres años de trabajo los diputados emitieron ocho decretos, aprobaron 43 leyes y realizaron nueve reformas de ley.

El aguinaldo

y el bono de marcha.

Los legisladores puntualmente cada año se otorgaron 41 días de aguinaldo. El primer año recibieron 66,010 pesos. En el 2001, 71 mil 740 pesos y este diciembre 73 mil 283 pesos.

?Tenemos que partir del hecho que ellos no son trabajadores del gobierno, no son de Hacienda ni de ninguna empresa?, dice Juan Manuel Alanís, ?por lo tanto no se justifica que haya la autorización de un aguinaldo porque no son trabajadores de nadie?.

?Al elegir ser representantes sociales prácticamente deben trabajar desinteresadamente. No debería hablarse de temas como aguinaldo y liquidación, son semejanzas que no se pueden tener?.

El presupuesto del Congreso del Estado para el 2002 fue de 96 millones 426 mil pesos. En él no está destinado ninguna cantidad para el pago del llamado ?bono de marcha?, que tradicionalmente se otorgan los diputados al finalizar la legislatura. En este año la cantidad será cerca de 145 mil pesos, los legisladores se han negado a dar a conocer el monto exacto.

?No habrá propiamente bono de marcha?, dice Heriberto Ramos Salas, Presidente del Congreso y Coordinador de la Fracción Parlamentaria del PRI, ?va a ser una compensación muy modesta dentro de nuestro propio presupuesto para terminar la relación laboral. Todavía no precisamos la cantidad, pero no serán lo que dicen algunos medios?.

Sobre el tema el panista Francisco Jaime Acosta comenta: ?no ha habido nada oficial, ha sido un teje y maneje?.

El presidente de Coparmex Laguna menciona que debe cumplirse las leyes y no cambiarlas de acuerdo a la conveniencia de los diputados.

?Estoy de acuerdo que se dé el dinero siempre y cuando esté estipulado en la legislación, pero no se vale en los últimos meses cambiar las leyes para que se lo den. Necesitamos como sociedad establecer los indicadores de productividad de los funcionarios públicos, basado en ellos entonces hacer la premiación a quienes hicieron un mejor esfuerzo, pero no para todos, porque en ese caso damos el mensaje a la sociedad de que trabajes o no, te lo mereces?.

Ricardo López Campos, miembro de la Comisión de la Contaduría Mayor de Hacienda del Congreso, afirma que el ?bono de marcha? no es ilegal, es algo que históricamente se da en los municipios y en el Congreso.

?No está relacionado con la ilegalidad, va con la capacidad de poder hacerlo o no?

El perredista Francisco Ibarra defiende la entrega del ?bono de marcha?, afirma que es necesario para poder vivir mientras los diputados se reintegran al ámbito profesional.

?En el caso de los diputados del PRD somos abogados, en estos tres años nos dedicamos de tiempo completo a las labores legislativas y dejamos abandonados nuestros despachos. El regresar implica ir a volver a levantar la cartera de clientes, entonces sí necesitamos el dinero... yo en lo particular requiero de un soporte para aguantar dos o tres meses sin percibir un salario decoroso?.

Juan Manuel Alanís no comparte la justificación del perredista. ?Ellos toman la decisión de ser diputados, si pierden una cartera de clientes ya sabían que la iban a perder. Saben que es un puesto que únicamente dura tres años?.

Francisco Ibarra afirma que la liquidación es algo normal en cualquier empresa, ? y aunque esto no lo es y que sea el pueblo el que pague nos parece absolutamente normal que se dé esta compensación?.

La productividad

Juan Manuel Alanís comenta que el sueldo de los diputados, arriba de los 40 mil pesos, es la percepción de un director de una empresa corporativa de alto nivel en su ramo. La persona debe reunir un perfil donde es necesario tener muy claros los objetivos y cumplirlos.

?Sobre todo que no sólo trabajen cuatro horas por semana. Los directores son quienes más trabajan y por supuesto el rendimiento no es el que da un diputado. Hay muchos más beneficios pagándole a un funcionario de alto nivel que un diputado, quien sólo presenta acuerdos, seguimientos, síntesis, sin contar los resultados. Es necesario ver avances palpables?.

Arturo Gallegos comenta que un director de una empresa depende su permanencia en el cargo de acuerdo a su rendimiento y eficiencia.

?No tiene garantizado tres años de sueldo, si no rinden lo cambian, a los señores es difícil que los cambien al menos que cometan un error garrafal?.

Francisco Jaime Acosta menciona la urgencia de que en Coahuila se legisle sobre los salarios de los diputados, ?para quitarles ese sesgo morboso que lo único que ocasiona es el beneplácito y la risa de la ciudadanía, al seguir etiquetando a los diputados como personas que no merecen el salario mínimo?.

Leer más de Reportajes

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Reportajes

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 12557

elsiglo.mx