El empleo de esta prenda predomina en las épocas de Primavera y Otoño
AGENCIA EFE
Se adapta a cada contorno del cuerpo como si modelara tu silueta y, sin embargo, sus diseños son tan heterogéneos que con él se puede identificar desde el rockero más recalcitrante hasta la aristócrata más elegante. El cuero es la prenda del Otoño y de la Primavera, y sus tintes combinan igual de bien en ambas temporadas.
Mick Jagger, John Bon Jovi o Bruce Springsteen son adictos a las cazadoras de cuero, y sobre un escenario no es difícil verles con alguna de estas prendas. Ricky Martin y Enrique Iglesias ciñen sus caderas con pantalones de napa en sus actuaciones; fueron famosas las mini minifaldas de Tina Turner, y lo son ahora los tops en cuero de Christina Aguilera o las botas de vértigo de Kylie Minoge. El cuero no tiene edad ni pasa de moda. Se renueva cada temporada con nuevas propuestas y avanzados cortes.
El cuero ha dejado de asociarse a una imagen agresiva y provocadora. Nadie diría que lo es Carolina Herrera o Beatriz de Borbón, Relaciones Públicas de Loewe, o Isabel Preysler, señoras todas ellas símbolo de la elegancia, y espejo en el que se fijan quienes quieren estar al día de las últimas tendencias.
Cremalleras, cazadoras de puños ceñidos o con un volante aflamencado, chaquetas de corte clásico, trench o amplios chaquetones forrados de piel, chalecos y hasta mantones en cuero bordados son algunas de las ideas para esta temporada.
Para toda ocasión
El cuero domina la oferta de las más variadas firmas, con un denominador común: la variedad en todas ellas. Nada tiene que ver el cuero de Versace, con el corte de Hugo Boss para caballero o las estéticas más adolescentes. Los hombres se lanzan a todo tipo de sugerencias en esta materia, pues han descubierto una textura atractiva y moderna, útil para toda ocasión, y que favorece la renovación del vestuario y de la imagen, sin romper esquemas.
Calvin Klein propone que las prendas de cuero se combinen con unos tejanos y una camiseta, e incluso con el sastre más impecable. No hay reglas, el cuero lo admite todo esta temporada.
Chanel actualiza el guardarropa al más puro estilo rockero, ajustado y provocador; Chloé o Balenciaga se lanzan a las cazadoras tipo bomber con cremallera y múltiples bolsillos, como si estuviéramos dispuestos a pilotar el nuevo prototipo aéreo; Michael Kors con sus vestidos combinados de cuero y gasa, o Gucci con un clásico de amplias solapas, en negro, por debajo de la rodilla, han marcado la pasarela.
Louis Vuitton apuesta por los pantalones y Demeulesmeester por la falda en cuero tratado y envejecido, acompañada por un amplio cinturón de flecos. Yves Saint Laurent Rive Gauche cede terreno a las tachuelas que prenden la piel como hojas a punto de desprenderse.
José Enrique Oña Selfa se ha estrenado con su primera colección para Loewe con propuestas en cuero color caramelo. El modisto belga de origen español, que a sus 27 años acaba de entrar en el club de los grandes, sirvió a la perfección la maestría en el trabajo del cuero que caracteriza a la histórica firma española, hoy propiedad del número uno del lujo mundial, el grupo francés LVMH.