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JAN YUNIS, Franja de Gaza.- Soldados israelíes a la búsqueda de militantes de Jamas atacaron ayer un vecindario de Gaza con tanques y helicópteros y mataron a 14 palestinos, la mayoría cuando un misil hizo impacto en una multitud. Los palestinos dijeron que los muertos eran civiles, mientras que Israel dijo que la mayoría eran combatientes.
El ataque de cuatro horas también dejó 110 palestinos heridos, incluyendo 25 que se encuentran en estado crítico, dijeron los médicos. Muchos de ellos recibieron heridas de esquirlas en la cabeza, pecho y abdomen. Los muertos tenían entre 14 y 52 años.
La operación, la más letal contra los palestinos en tres meses, suscitó críticas internacionales a Israel, planteó dudas sobre la voluntad de los militares israelíes por evitar bajas civiles y amenazó sofocar los más recientes esfuerzos por mitigar dos años de violencia entre israelíes y palestinos. El viceministro de defensa israelí, Weizman Shiri, dijo que sentía la pérdida de vidas civiles. “¿Pero qué podemos hacer?”, se preguntó. “Es la guerra”.
Los militares dijeron que Jan Yunis es un bastión del grupo militante islámico Jamas, que ha matado a centenares de civiles israelíes en docenas de ataques suicidas. Agregaron que durante el ataque los soldados arrestaron a un hombre buscado que portaba un explosivo casero. Sin embargo, esta vez no hubo indicación de ningún blanco en particular, como en ofensivas anteriores.
La operación comenzó pasada la medianoche cuando unos 40 tanques, apoyados por helicópteros, irrumpieron en las calles principales de la ciudad.
Los militares dijeron que los soldados intercambiaron disparos con palestinos y que mataron a dos, incluyendo una mujer de 45 años, dijeron los médicos.
El misil fue disparado en un vecindario muy poblado hacia el final de la operación, cuando los israelíes se retiraban. El brigadier general Yisrael Ziv, comandante del ejército en la zona, dijo que las tropas encontraron fuerte resistencia de los palestinos y que muchos hombres armados se congregaron en las calles cuando se retiraban. “Hicieron muchos disparos y lanzaron granadas. Allí hubo una batalla”, dijo. “El helicóptero apuntó contra este grupo y los alcanzó”.
Las versiones palestinas
fueron distintas
Wissam Abdeen, que cuando los israelíes se retiraban los residentes salieron de sus casas para inspeccionar los daños, y que no había gente armada en el grupo. Otro testigo, Walid Sabah, cuyo hijo Abdula de 17 años fue muerto en el ataque con el misil, dijo que había algunos hombres armados en la calle pero que no estaban disparando.
Abdeen dijo que cuando las tropas se iban, oyó el sonido de los helicópteros. “Una enorme explosión me levantó en el aire y me arrojó a diez metros de distancia”, afirmó.
Ziv dijo que la batalla fue filmada desde un avión no piloteado, dijo también que ninguno de los palestinos muertos estaban en la lista de buscados por Israel.
La mayoría de los muertos y heridos —incluyendo numerosos niños hasta de 9 años— fueron conducidos al Hospital Nasser de la ciudad. Allí, mientras más de 500 personas estaban congregadas frente a la puerta posterior donde está la morgue, disparos de las ametralladoras y fusiles israelíes hicieron impacto en el patio. La gente salió corriendo para refugiarse. Un hombre de 27 años murió y tres personas cayeron heridas, incluyendo un niño de 14 años herido en el cuello. Una bala erró apenas a un periodista, que también fue alcanzado en el zapato por un fragmento de bala.
En Washington, el vocero del Departamento de Estado Richard Boucher dijo que el gobierno estadounidense estaba “profundamente preocupado” por las bajas civiles, a la vez que avaló el derecho israelí a defenderse.
Javier Solana, el jefe de política exterior de la Unión Europea que visita la región, dijo estar conmovido por el número de bajas. “Pienso que es más dramático debido a los esfuerzos que el pueblo palestino estaba haciendo en las últimas semanas para salir del camino de la violencia”, afirmó.