Torreón, Coah.- Nunca antes había llegado una persona que fueran tan fanática de algún artista. Dulce María Ramírez Baldenegro, se ganó a pulso salir publicada en la sección El Fanático del Siglo.
Esta joven de 15 años y residente del Ejido Santa Ana del Pilar, ha sido capaz de muchas cosas con tal de tener cerca –aunque sea musicalmente- al grupo chileno La Ley. A su escasa edad se atrevió a intentar cortarse las venas porque le quemaron sus discos y posters del grupo, también salió con un hombre mucho mayor que ella para que le comprara los compactos de la banda.
Su historia como fanática de La Ley inició tres años atrás. Dulce tenía 12 años y era una chica cumbianchera, pero el inevitable día llegó: en el programa Al Fin de Semana vio a un grupo que se hacía llamar La Ley. Nunca antes había escuchado nada de ellos pero con sólo verlos y escucharlos por unos instantes cambió su vida. Desde entonces la banda comandada por Beto Cuevas forma parte de ella.
A partir de ese momento, Dulce se dio a la tarea de comprar los discos, conseguir fotos, posters y artículos del grupo, pero le puso mayor énfasis a informarse sobre ellos, quería saber lo más posible de los chilenos.
Lo peor estaba por venir
Todo transcurría con tranquilidad, ella ya estaba consagrada al grupo, pero la chica empezó a juntarse con una mala compañía, era un joven que realizaba actos satánicos.
Dulce inició a jugar a la ouija y hacer lo mismo que él, esas acciones empezaron a cambiarla, su conducta era rebelde y sus calificaciones bajaron considerablemente. Fue entonces, que sus padres tomaron cartas en el asunto, le preguntaron a dicho joven a qué se debía la actitud de su hija, él respondió que ese comportamiento era porque Dulce escuchaba la música de La Ley.
Inmediatamente los padres de la muchacha tomaron los objetos que la chica tenía en su habitación como posters y discos y los quemaron, fue tal la desesperación de Dulce porque su tesoro más preciado había sido destruido, que optó por tratar de cortarse las venas, afortunadamente eso no trascendió.
Los padres de la joven no sabían de qué manera ayudar a su hija, necesitaban que alguien les dijera si la música de La Ley era satánica, entonces acudieron a un sacerdote para que les contara si los temas del grupo tenían mensajes subliminales, el presbítero analizó las canciones y aseguró que no había nada malo en ellas.
Mientras tanto, Dulce desesperada porque ya no tenía los discos de La Ley ni dinero para obtener otros, decidió “salir” con un hombre mayor que ella. Él le había prometido que le compraría todo lo que quisiera del grupo, incluso hasta la llevaría a verlos. Cuando Dulce logró su cometido, de conseguir nuevamente los discos, lo dejó.
Actualmente, la relación entre Dulce y sus padres es muy buena; ellos le permiten que escuche La Ley, pues saben que no hay nada malo y ella volvió a ser la muchacha tranquila y responsable.
Dulce cumplió 15 años el pasado 1 de octubre; su mejor regalo fue haber sido una de las personas que ganó una playera de La Ley gracias a un concurso realizado por El Siglo de Torreón. “Ha sido el mejor regalo de mi vida”.
Dulce María Ramírez Baldenegro espera ansiosamente el concierto que el grupo chileno ofrecerá el próximo domingo 27 de octubre en la Plaza de Toros Torreón. Sabe que será una fecha inolvidable y uno de los días más importantes de su existencia.