El próximo día 29 de septiembre tendremos elecciones para diputados locales y presidente municipal. Las campañas de todos los candidatos giran alrededor de las carencias habituales como seguridad, atención ciudadana, servicios públicos, etc.; cosa que no podemos cuestionar pues resulta obvio que cualquiera que pretenda ser alcalde debe atender fundamentalmente estas cuestiones que pertenecen, por así decirlo, a lo más elemental de la administración del municipio.
Igualmente obvio nos parece el ofrecimiento de honestidad y trabajo por el bien de la ciudad. Imagínese usted que un candidato le dijera abiertamente que ya tiene arregladas concesiones con empresas privadas que han aportado fondos para sus campañas, para que se encarguen de unos cuantos trabajitos municipales; o que por ejemplo, nos dijeran que piensan colocar a cuanto familiar y conocido tengan en puestos administrativos de segundo orden si se quiere, pero cuyos sueldos no resultan nada despreciables y se cargan, eso sí, al costo del erario municipal que todos cubrimos con nuestros impuestos. Es lo imposible dentro de lo probable.
Sin embargo, los candidatos no nos dicen absolutamente nada acerca de problemas que son cruciales, y de los cuales depende en mucho, la situación futura de nuestra ciudad. Por ejemplo, ¿cuál es la situación de la deuda pública municipal? ¿En qué medida el municipio, supuestamente ?libre?, esta subordinado a las decisiones de la gubernatura del Estado? Más aún, ¿cómo nos vemos afectados por los arbitrarios recortes decididos por el gobierno federal a nuestras participaciones?
La ciudad de Torreón es una de las principales ciudades del país, la riqueza que aquí se genera y los impuestos que de ella se derivan no mantienen una adecuada proporción con las participaciones que recibimos por parte de otras instancias de gobierno. Este federalismo al revés que padecemos los mexicanos, y que no nos atrevemos a cambiar, ahoga a los municipios como el nuestro. La actividad económica crece, el número de automóviles que circula por calles y avenidas aumenta sin cesar, camiones y vehículos pesados de todo tipo necesitan infraestructura adecuada para circular; igual podríamos decir de los servicios educativos, por ejemplo, ya que la población escolar crece cada día y el número de escuelas y maestros que necesitamos en el municipio es cada vez mayor y más urgente; el problema de la seguridad, que si bien requiere de mayores recursos, queda siempre la duda si esos recursos deben consistir en más policías, más patrullas y más y mejores armas, o mayores programas sociales que prevengan en lugar de reprimir el problema de la delincuencia. Tenemos el dato, por ejemplo, que el anterior gobierno municipal, tenía el firme propósito de eliminar la deuda pública; sabemos que los recortes dictados, de manera arbitraria por el gobierno federal cancelaron dicha posibilidad. ¿Cuál es la posición de los candidatos al respecto?.
En el plano político existe un fuerte rumor de que el gobernador del Estado y ciertos grupos del PRI, ?cederán? varios municipios al PAN en aras de un acercamiento con el presidente Fox. ¿Será por ello que no terminó nunca de despegar la campaña de Laura Reyes?. Veamos el caso del PRD y otras agrupaciones. Varios líderes del partido se quedaron con las ganas de participar como precandidatos del partido, ya que en función de una disciplina partidaria, se les impuso la candidatura de Francisco Dávila, hasta hace poco tiempo ferviente defensor de los ideales priístas. Concertaciones políticas, arreglos cupulares y truculencias políticas caracterizan el presente proceso electoral. Pero que le vamos a hacer, el sistema político consagrado desde las reformas de 1976 es un sistema basado en los partidos políticos. Éstos, en algunos casos, se han convertido en negocio y forma de vida de muchas personas, gracias al financiamiento público que otorga el IFE, en otros, la mentira y el ocultamiento de los verdaderos fines que se persiguen, se ha convertido en práctica común. Así las cosas, ¿cómo hemos de participar en la jornada electoral del próximo día 29? Muchas personas me han pedido mi opinión .....¿por quien votará?, nos dicen. Después de exponer situaciones como las ya arriba citadas, y otras más que surgen de la discusión, llegamos a la conclusión de que no debemos abstenernos, debemos votar y mientras dicha votación resulte masiva, en esa misma medida estaremos respaldando la democracia.
Sin embargo es necesario dar una lección a quienes, a través del gobierno manipulan a los partidos, y a quines dentro de estos, se acomodan por conveniencia a la situación y manipulan a los electores. Creemos que en las actuales circunstancias, cualquier ciudadano preparado, sin intereses creados, sin compromisos de ninguna especie, sería el indicado. Torreón necesita ser bien administrado, es cierto, pero necesita reorganizarse y luchar por lo que necesita, le corresponde y, además, merece.
Por esa razón, el próximo 29 de septiembre escribiré mi nombre en la boleta y votaré por mi mismo.
E-mail:
alfonsoluquin@msn.com