Torreón, Coah.- A través del teatro se fomenta y desarrolla la capacidad estética de las personas. El teatro universitario es un camino para aprender a expresarse en forma espontánea, dice Mari Carmen de Aguinaga Peraza de 22 años, actriz de teatro universitario.
?El teatro permite mostrar la personalidad, manifestar e identificar actitudes y favorecer el desarrollo mental, físico y social de los actores?.
La joven universitaria, a diferencia de los grupos de teatro independiente, no recibe remuneración económica, sin embargo su esfuerzo y arduo trabajo se recompensa de la mejor manera: cuando presenta su trabajo al público.
Actualmente la actriz forma parte del taller de Teatro de la Universidad Iberoamericana, dirigido por el director Gerardo Moscoso y a pesar de que recibe invitaciones por parte de compañías de teatro independiente para formar parte de sus equipos, ella las rechaza, pues en su grupo hay un fuerte compromiso que absorbe parte de su tiempo.
?Al principio me decidí por ser parte de un taller de teatro universitario, principalmente porque me acomodaba con las actividades escolares y después porque haces amigos, compartes con gente de tu edad la pasión por este arte.?.
El teatro es uno de los puntos en los que gira la vida de Mari Carmen, además de una disciplina que la forma y hace crecer como ser humano, que le permite mejorar su existencia y la de los demás, aspecto esencial para lograr trascender como persona.
?Desde que tengo uso de razón me gusta actuar, cuando era niña jugaba a representar mis propias historias y cambiar de personalidades, incluso hasta la fecha me sigo divirtiendo con esta actividad?.
En 1997 la joven inició actuando con el grupo de teatro de la Pereyra.
En la familia de Mari Carmen, existen antecedentes actorales por parte de su abuela paterna y un tío quién formó parte del grupo de Teatro del Tecnológico de Monterrey, por su parte ella ha participado en nueve obras.
Mari Carmen dice que actuar con el taller de la Ibero le ha dado muchas satisfacciones como conocer amistades maravillosas, pero sobre todo, aprender de los directores Juan Carlos Martínez y Gerardo Moscoso.
?El proceso de preparación de una obra y la adrenalina que te provoca el estar frente al público es algo que no tiene comparación, es como una magia de interacción entre el actor, escenario y público?.
Mari Carmen piensa que el arte escénico escolar, está más protegido que el independiente, pues este último corre el riesgo de no ser del agrado del público, difícilmente se puede recuperar la inversión económica de la propuesta, aunque ambos se preparan de la misma manera con compromiso y fuerte trabajo en equipo.
?El tiempo que inviertes como actor no se puede contabilizar, pues la actividad de teatro no se limita a estar presente en los ensayos, sino que fuera de ellos también trabajas mentalmente en la creación de tu personaje, cuando se acerca la fecha de una presentación los ensayos son de cinco días por semana?, señala la estudiante.
Titularse y estudiar una maestría en el extranjero donde pueda continuar con su formación como actriz, son las prioridades actuales de la joven, ?es un orgullo para mí formar parte el grupo de mi escuela, pues el teatro que hacemos es de calidad, crítico y con propuesta, no hace teatro experimental sino profesional, que se enriquece con la filosofía ignaciana?. de la que somos parte?.