LA JORNADA
México, DF., El área natural protegida Cuatrociénegas, Coahuila, con manantiales únicos en el planeta donde se reproduce el hábitat que había en el origen de la vida y donde la NASA tiene interés de investigar porque tiene características parecidas de lo que habría en Marte, está en riesgo, porque este mes empieza la siembra de cinco mil hectáreas de alfalfa -constituida en 90 por ciento de agua— en el valle El Hundido, a 20 kilómetros de la reserva, y se abrieron nuevos pozos para extraer el líquido.
Es reconocida a escala internacional como uno de los humedales más importantes de la Tierra, con una extensión de 84 mil hectáreas y constituida por centenas de pozas y decenas de especies únicas del lugar, además de las bacterias conocidas como estromatolitos —con 3.5 billones de años—, responsables de que haya oxígeno.
La bióloga Valeria Souza detalla en entrevista que Cuatrociénegas es el sitio con más estromatolitos vivos y el único lugar del mundo donde se pueden observar rodeados de peces y caracoles. “Ahí toda la comida depende de las bacterias, como al principio del mundo, y esa es la única ventana que tenemos en el planeta sobre la vida al principio de la biodiversidad”.
La zona es cercana a La Laguna, región productora de lácteos, y está a una montaña de distancia del valle El Hundido, donde se prevé que en unos días empiece el cultivo de alfalfa en cinco mil 200 hectáreas que ya fueron desmontadas sin permiso y donde se abrieron pozos, lo cual hizo que habitantes del municipio presentaran una demanda ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
La especialista precisa que los estromatolitos son los fósiles de bacterias más antiguos que se puedan conocer y en Cuatrociénegas siguen vivos después de 3.5 billones de años. “Este sitio reproduce el hábitat primitivo que es el precámbrico, cuando en la Tierra la vida era a partir de las bacterias. Los estromatolitos, que se ven tan indefensos -tienen forma de piedras—, crearon la primera gran contaminación atmosférica porque liberaron oxígeno y se creó la fotosíntesis”.
Agrega que antes de los estromatolitos la vida no tenía energía, fueron ellos “los que hicieron la vida como hoy la conocemos y es el único sitio que tiene el ecosistema complejo”. Precisa que también se han encontrado en Guerrero Negro, Baja California, y en Australia, pero no son tan antiguos como los de Coahuila. Una de las explicaciones de que el agua de Cuatrociénegas tenga las características químicas del principio de la vida, “es que era un mar escondido en la división continental, quedó atrapado, y hace 400 mil años salió a la superficie; se mantiene porque nadie puede invadir esas aguas sin fosfato, ya que estamos acostumbrados a líquido de otra calidad”.
Precisa que empezó a estudiar el lugar cuando la NASA, interesada en el sitio para entender “el origen de la vida en la Tierra y comprenderla en otros planetas”, se acercó a ella porque en México es la única especialista en ecología evolutiva de bacterias. Además, las sales de Cuatrociénegas, una especie de yeso, son parecidas a lo que habría en Marte. El programa lleva tres años y quizá continúe con el análisis de la hiperdiversidad, ya que en cada manantial hay especies únicas y diferentes. Se esperaba encontrar una o dos bacterias, pero no fue así, “no podemos saber cuál es la más importante, porque todas son diferentes”. Respecto de la situación del acuífero explica que un grupo de especialistas trató de ubicar el nivel de profundidad del agua, pero no lo localizó, lo cual indica que es más hondo de lo que se esperaba y lo sorprendente es que “se han encontrado bacterias en superficie, similares a lo habría en las ventilas hidrotermales al fondo del Atlántico, a tres mil metros de profundidad”.
Detalló que la cuenca la comparten varios valles, lo cual se ha evidenciado porque cuando se abrieron pozos en Ocampo o en El Hundido, bajó el nivel de agua de los manantiales de la reserva. “Por pura lógica hay que suponer que el agua está conectada, no se puede sacar agua de un lado, que se supone es independiente, y que baje el nivel del otro lado”.
Ahora que con el cultivo de alfalfa se sobre explote el valle El Hundido, se prevé que baje el nivel de agua de las pozas, porque ese forraje está constituido por 90 por ciento de líquido. De acuerdo con técnicos la zona es de riego, y para cubrir cien metros se necesitan mil litros de agua; en tres meses se deben hacer 20 riegos, mientras en cultivos tradicionales se hacen seis.
El peligro, explica Souza, es que si cambia la calidad del agua sin fosfato de las pozas, desaparecerán los estromatolitos y todas las especies que ahí se localizan. “El ecosistema es frágil y lleva millones de años comiendo cosas específicas; si se cambia este hábitat o se contamina el agua, se acaba”.
Sostiene que un estudio de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) establece que Cuatrociénegas está formada por una especie de vasija de arcilla y las pozas no se afectarán. Pero las evidencias indican lo contrario. Debido a que se sobrexplotó el valle de Ocampo, cercano a la reserva, han desaparecido alrededor de 50 pozas de 300 que había, “el problema es que cada una tiene diversidad única y ésa se pierde para siempre”. En una carta que habitantes del municipio de Cuatrociénegas mandaron al gobernador de la entidad le recordaron que hace 15 años hubo protestas por las perforaciones en el valle de Calaveras y el argumento fue que sus acuíferos eran independientes de los de Cuatrociénegas, pero la realidad ahora es la escasez de agua.
En el programa de manejo de la reserva que hizo la Secretaría de Medio Ambiente, y Recursos Naturales, se señala que la existencia de un gran número de manantiales dentro y alrededor del área protegida, “han creado expectativas de desarrollo tanto agrícola, como industriales y turísticas, que utilizan el agua de diferentes formas. Aunque la mayor parte del líquido debería ser considerada no apta para la agricultura por su alto contenido de sales, ha sido canalizada en diferentes puntos para ser utilizada en proyectos de irrigación”.
Indica que “otra amenaza importante para el humedal es la apertura de pozos profundos en los valles circunvencinos, aunque se desconoce el efecto global que puedan tener los cambios en el volumen de la fuente de agua potable para la ciudad de Cuatrociénegas, conocida como el Agua del Cañón”. Además, de acuerdo con la Conagua, la situación del agua de la reserva es de sobrexplotación, y una de las grandes amenazas es la extracción del agua irregular y las grandes pérdidas que se tienen por la mala conducción.