A la hora de vestirse, no hay mayor problema que preguntar: ¿Cómo me queda?, y que nadie se anime a decirte la verdad. Para no pasar un mal rato, te enseñamos lo que debes evitar.
1.- Utilizar colores inapropiados: No todos los tonos de piel son iguales. Los colores rosa cálido o verde que ves en el rostro de algunas modelos, pueden ser estupendos para ellas, pero horribles para tí. Experimenta con diversos colores y combinaciones, para ver cuáles son los que mejor te quedan, sin importar lo que esté de moda.
2.- Utilizar un talle demasiado pequeño: Si no cabes, no la uses. Exprimirse dentro de un talle muy pequeño puede alimentar tu vanidad, pero la puede hacer aparecer algo desubicada frente a los demás. Compra la ropa que te sirva. Si con las nuevas prendas te cuesta sentarte, o te sientes apretada como un pavo, seguramente no te vas a ver bien. ¿Por qué hacer pasar a tu cuerpo por una especie de tortura?
3.- Maquillaje inadecuado: Así como vistes diferentes ropas para diferentes situaciones, tu maquillaje debe cambiar también de acuerdo a la ocasión. Y si todavía sigues con esos ojos de Cleopatra, es tiempo de dar vuelta a la página y saber cuáles son las tendencias del maquillaje.
4.- Zapatos muy pequeños: Si tus zapatos han visto días mejores, encuentra un buen taller de reparaciones de zapatos y arréglalos ya. Utiliza algún tipo de protector cuando los guardes en el ropero junto a otros zapatos. Invierte en un buen par si piensas que vas a utilizarlos de forma diaria. No compres aquellos que están de oferta, para luego preguntarte por qué no duran.
5.- Uñas quebradas, pintura desgastada: Mantén tus uñas limpias y cortadas de forma pareja. Si estás en un ambiente de negocios, inclínate por los colores conservadores y evita los colores muy brillantes, rosas o dorados. Las largas tipo dragón, no son apropiadas para el trabajo.
6.- Manchas bajo el brazo: Primero, compra un desodorante que funcione con tu cuerpo. Es posible que tengas que probar varios para encontrar el mejor, y tengas que cambiarlo ocasionalmente, ya que la química del cuerpo se modifica con el tiempo; por ejemplo, después de tener un bebé, al tomar un nuevo medicamento, al pasar por la menopausia, etc. Si traspiras mucho, podrías prevenir las manchas utilizando un atuendo que posea algún protector en la zona de las axilas.
7.- Las líneas visibles del corpiño: Asegúrate de que las tiras de tu sostén se ajusten correctamente. Si no permanece pegado al cuerpo en la parte posterior; se resbala de los hombros, y deja que los pechos cedan en vez de sujetarlos, es tiempo de cambiarlo.
8.- Las malas combinaciones: El pantalón te queda precioso, el saco también, la camisa divina y los zapatos monumentales. Pero, combinados, son un desastre, ya que sus colores no pegan y sus cortes son de diferentes estilos de moda. No elijas las prendas de forma separadas, sino en combinación. Cuando te dirijas a comprar una prenda, ten en mente qué es lo que ya tienes.
9.- Raíces: El color del cabello puede hacer maravillas en tu apariencia, pero puede también hacer estragos en tu bolsillo. Si no puedes permitirte un mantenimiento regular de un determinado color de tinte, considera hacerte rayitos. Asegúrate de que el color de tu pelo conbine con el tono de tu piel.