POR MIRIAM GONZÁLEZ,
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Homenajes a Marilyn Monroe, Víctor Hugo, Frida Kahlo, Diego Rivera, Pedro Infante, Gabilondo Soler y Jaime Sabines, se hicieron presentes en los altares de muertos que realizó la comunidad estudiantil de la Universidad Autónoma de La Laguna (UAL) ayer viernes.
Ante la presencia de autoridades educativas y culturales, los participantes académicos de educación media y licenciatura dieron rienda suelta a su creatividad, con el afán de rescatar una de las más antiguas tradiciones mexicanas.
Las flores de cempasúchil, el papel picado, el incienso, la toalla, el jabón, la comida favorita, el pan conocido como “de muerto”, las fotografías, la sal, las velas iluminadas, el agua, y los demás elementos que acompañan esta representación fueron diseñadas por los alumnos como parte del concurso de altares de muerto que realiza cada año el departamento de Arte y Cultura.
Como jurado, se invitó a la directora del Instituto de Documentación y Centro Histórico “Eduardo Guerra”, Elisa Gutiérrez Galindo.
La premiación se llevará a cabo la semana próxima en esta casa de estudios, sin embargo lo más importante es continuar con las costumbres mexicanas que caracterizan la raza y a la sociedad en general.
Entre otros personajes, también se rindió culto al doctor Serafín Ruiz de Zárate, anterior decano del Colegio de Ciencias e Ingenierías de la UAL; al doctor Federico Gómez Santos, quien da el nombre a la secundaria anexa a esta institución; y al actor Mario Moreno Cantinflas, uno de los personajes más queridos por los mexicanos.
En México se tiene la creencia que en estos días los difuntos regresan del más allá, para visitar a sus parientes que han quedado en la tierra, por lo que los vivos deben esperarlos alegres, con música y con todo lo que les gustaba en vida. Del panteón a la casa, se marcan senderos con pétalos de flores que indican a las ánimas el camino hacia el altar donde se alimentarán con los olores de la ofrenda.
La cultura mexicana se ha caracterizado a través de los años, por rendir un culto muy especial a sus muertos, se habla de una antigüedad de mil 800 años antes de Cristo. Los entierros de esa época se acompañaban con gran cantidad de objetos cerámicos, vajillas, figurillas y máscaras que dan una idea de las representaciones más antiguas de la muerte.
Es por ello que la UAL mantiene esta tradición anualmente, para fomentar las costumbres que nacieron en las primeras civilizaciones que habitaron este territorio, premiando la creatividad y el apego a la tradición original.