La espera ha terminado, hoy se pone en marcha la temporada
2002-03 de la Liga Nacional de Futbol Americano Profesional (NFL), con el partido entre los
Gigantes de Nueva York y los 49ers de San Francisco, a jugarse sobre el pasto natural del Estadio Gigante en
East Rutherford, Nueva Jersey, en donde se espera una fiesta en grande.
Más allá del partido, la NFL rendirá homenaje a los héroes y a las víctimas de los atentados terroristas del 11 de septiembre, en Nueva York, bajo la marca de una gran fiesta
de libertad en aquel país, el juego se llevará a cabo después de una serie de conciertos y
actividades previas al juego inaugural.
La NFL por primera vez inaugura una temporada en jueves, porque tradicionalmente se
había hecho en domingo; como marco habrá una gran fiesta para Nueva York, y en el
emparrillado un clásico de la Conferencia Nacional, Gigantes contra 49ers.
San Francisco llega a este encuentro después de una gran temporada de
12-4-0, están listos para pelear la postemporada y se puede decir, en su campaña de retorno a
los primeros planos, luego de dos temporadas perdedoras, antes de los 12 triunfos del 2001.
Los Gigantes llegan con muchas incógnitas, han sido desmantelados a la
defensiva y esto repercutirá en sus resultados; sus números fueron de 7-9 en ganados y
perdidos, una gran decepción, porque después de haber estado en el Súper Tazón, no
asistieron a la postemporada y será difícil que lo hagan en ésta, a pesar de que a
la ofensiva cuentan con las armas suficientes.
San Francisco se mantiene como una potencia aérea, Jeff García y Terrell Owens deben
ser considerados entre los mejores de la liga en sus posiciones, García ha tomado el ritmo de
Steve Young y Joe Montana, sus números así lo demuestran, Owens es simplemente uno de los
mejores de la liga al recibir pases de anotación y lograr jugadas grandes en momentos decisivos.
Los Gigantes confían en Kerry Collins, quien ha tenido las mejores temporadas de su
carrera, en Nueva York, cuentan con corredores como Ron Dayne o Tiki Barner, y Amani Toomer en calidad de receptor. Ofensivamente pueden mover el balón, su problema es que
difícilmente podrán parar una ofensiva de respeto.
El juego es un clásico, estas dos escuadras disputaron en dos ocasiones el
título de la Conferencia Nacional durante los noventa; en estos partidos se
consagró Jerry Rice y cómo olvidar cuando Jim Burt noqueó a Joe Montana y lo dejó fuera del
juego para que a la postre Nueva York ganara el partido.
El pronóstico está todo a favor de los 49ers de San Francisco, tienen una mejor ofensiva,
una defensa bastante consistente, y un deseo de ganar fuera de casa, los Gigantes tendrán el
apoyo de su público, pero también su presión, los 49ers deben ganar por margen de siete puntos.