La Jornada
México, D.F.-Las autoridades capitalinas no intervendrán en la vida interna de los sindicatos locales, ni pretenderán imponer líderes “peleles”, afirmó el jefe de Gobierno del Distrito Federal. Pero advirtió que no deben confundirse los derechos de los trabajadores, con interés de partidos, grupos o personas.
López Obrador se manifestó incluso a favor del derecho de huelga, cuando hay de por medio una causa justa. Pero lo que no se vale, dijo, es pretender llevar adelante acciones en contra de la población, nada más porque “nos cae mal el jefe de Gobierno”. Insistió en que fueron los sindicatos de la ciudad de México los que más altos incrementos salariales recibieron este año. Pero no porque hubiera protestas, sino “por convicción” de las autoridades locales, que buscan mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y no de sus líderes, porque “yo no soy cómplice de la corrupción”. Incluso, dijo, hubo otros líderes sindicales que lo buscaron para decirle: “Oiga, bájele, no ponga tan arriba el tope porque después viene la revisión para el gobierno federal y para otras empresas”, relató.
Como colofón al conflicto que su gobierno enfrentó con las dirigencias de los sindicatos del metro y de la administración capitalina, López Obrador destacó la necesidad de un sindicalismo democrático y autónomo en México, si bien a advirtió que pasará tiempo para alcanzar estas condiciones.
En su conferencia de prensa matutina el jefe de Gobierno aseguró que, si bien han cambiado las condiciones de sometimiento de los sindicatos, aún falta camino qué recorrer.
“Ya quedó atrás -dijo— aquel sindicalismo protegido por el régimen, que ayudaba a controlar a los trabajadores mediante la manipulación y cometía atrocidades contra de la clase trabajadora. Pero aún llevará tiempo que se ejerza plenamente la democracia en los sindicatos”, dijo.
Advirtió, sin embargo, que los sindicatos requieren autonomía, pues “mal haría el gobierno imponiendo dirigentes a modo sólo para que no haya problemas”. Y aseguró que su gobierno no impondrá “peleles de dirigentes ni nos vamos a meter en la vida interna de los sindicatos”.
Luego de su conferencia de prensa, el jefe de Gobierno levó a cabo un recorrido por las calles del Centro Histórico, donde afirmó que las obras viales que allí se realizan presentan 75 por ciento de avance y que las calles Tacuba y Madero estarán listas para el desfile militar del 16 de septiembre.
López Obrador confirmó también su asistencia a los festejos del Grito de Independencia, en Palacio Nacional, invitado por el presidente Vicente Fox. Sobre su informe de gobierno que presentará el martes ante la Asamblea Legislativa, López Obrador se dijo listo para rendir cuentas y se manifestó al margen de las diferencias que existen en la fracción del PRD.