Internacional Atentados DONALD TRUMP Venezuela

Guardia nacional dispersa marcha anti-chavista

Reuters

CARACAS, VENEZUELA.- Tropas de la Guardia Nacional de Venezuela dispersaron ayer con gas lacrimógeno a grupos de opositores y partidarios del presidente Hugo Chávez, durante una tensa marcha de miles de adversarios del gobierno en Caracas contra la intervención de un cuerpo policial.

Los soldados dispersaron a decenas de “chavistas” que les lanzaron piedras, palos y botellas mientras trataban de atacar a la marcha que se dirigía al céntrico Parlamento, al grito de “¡No pasarán!” y “¡sucios, asesinos!”.

También lanzaron gas contra pequeños grupos de indignados manifestantes opositores que cargaron contra los soldados, en confusos incidentes a varias cuadras de los grupos “chavistas” que rodeaban la avenida Universidad, por donde transitaban.

La marcha fue convocada por alcaldes y gobernadores estatales de oposición que sostienen que el gobierno violó la ley al quitar el control de la Policía Metropolitana (PM) al alcalde opositor Alfredo Peña el fin de semana.

Según sus detractores el mandatario, un militar retirado que sobrevivió a un breve derrocamiento en abril, podría ejercer medidas similares contra otros cuerpos policiales municipales del país, radicalmente polarizado en torno a Chávez.

Cientos de policías y soldados de la Guardia Nacional (GN) y del Ejército custodiaban la marcha, tratando de evitar la repetición de la violencia entre los simpatizantes de Chávez, sus adversarios y las fuerzas del orden, que ha dejado al menos dos muertos y varios heridos este mes.

Los partidarios del presidente trataron de impedir el paso de la marcha opositora hacia lo que llaman “territorio chavista”. La GN sólo permitió el paso de un pequeño grupo de líderes anti gubernamentales para que entregaran un documento contra la intervención a la Asamblea Nacional.

Un partidario de Chávez, en una esquina cercana al camino de la marcha, dijo que no iban a permitir el paso.

“El pueblo no los va a dejar pasar”, aseguró el “chavista”, de unos 50 años, quien no se identificó.

Policía en el ojo del huracán

La intervención de la PM, que agrupa a unos 9,000 hombres, se concretó el sábado de efectivos militares y vehículos blindados, lo que inflamó más los ánimos en un país donde la oposición exige la salida de Chávez, mientras el presidente, en el cargo desde 1999, reitera que no renunciará.

Leopoldo López, alcalde opositor del acaudalado municipio caraqueño de Chacao, dijo que el documento de protesta entregado a la Asamblea incluye una condena a “una lesión a la descentralización (...) fue una toma por la fuerza y un secuestro a la autonomía”.

También incluye la exigencia de una rápida salida electoral para la crisis política del quinto exportador mundial de petróleo, añadió.

“Estamos protestando contra el abuso del gobierno que ha intervenido a la Policía Metropolitana. Es decir, en Venezuela, no hay Estado de Derecho”, dijo Dorindo Burgo, un maestro de 39 años quien elevaba una pancarta que decía “Basta de abusos”.

El gobierno dice que la intervención de la PM obedeció a razones de orden público, luego que un pequeño grupo de policías mantuvo por más de un mes un conflicto laboral. Tras remover a su directiva, Chávez nombró a otro jefe al que muchos de los policías no reconocen como su líder.

El mandatario llamó a sus seguidores a salir a las calles a defender la medida de intervención en la PM. Ayer, a su salida de un acto con empresarios porcinos, aseguró que “la intervención de la policía continúa, es válida, es legal”.

Protestó por que los brotes de violencia política le quitan el tiempo necesario para adelantar su “revolución” a favor de los pobres. “Cuánto tiempo tengo que dedicar a esas perturbaciones (...) Mucho tiempo, demasiado tiempo”.

Creciente tensión política

La medida en la PM siguió a un incremento del patrullaje militar de Caracas, ordenado por el gobierno la semana pasada tras violentos choques callejeros entre agentes policiales y partidarios de Chávez.

Los detractores dicen que la “militarización” de la capital busca amedrentar a la oposición, a la que Chávez acusa de conspirar contra su gobierno y de carecer de liderazgo.

Sus enemigos acusan a Chávez de haber propiciado la división de clases en el país de 23 millones de habitantes, de querer imponer un gobierno comunista al estilo de Cuba y de llevar al país a la ruina económica.

La marcha de ayer fue convocada un día después de que la GN dispersó a opositores que bloquearon una vital autopista de Caracas con gases lacrimógenos y perdigones. Igual trato recibieron el domingo opositores que manifestaron contra la intervención de la PM.

Luego de varios días violencia callejera de inspiración política en la capital, el Departamento de Estado de Estados Unidos —el principal cliente petrolero de Venezuela— expresó su preocupación por la situación en el país he hizo votos para el fin de la violencia.

“La violencia debe ser evitada (...) el objetivo sigue siendo el mantenimiento del orden constitucional y el no tomar ninguna acción fuera de él, por lo que estamos observando muy de cerca los acontecimientos”, dijo el portavoz del Departamento, Philip Reeker.

Entre el hervidero de las calles de Caracas, la oposición y oficialismo se han reunido en una mesa de negociaciones para tratar de buscar una salida electoral con el auspicio de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Leer más de Internacional

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Internacional

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 10027

elsiglo.mx