MEXICO, D.F..-Orlando Magaña, familiar y vecino de la familia Narezo Loyola e hijo de un ex comandante de la Policía Judicial Federal, es señalado por autoridades judiciales como uno de los principales sospechosos de la masacre que costó la vida a siete personas.
Dicha persona es señalado como amigo de uno de los hijos de la mencionada familia, quien tiene su domicilio a sólo unas casas de donde ocurrieron los hechos de la semana pasada. Vecinos del lugar confirmaron en entrevista, que tanto Orlando Magaña como su padre y demás familiares, abandonaron su casa en
la calle de Cuitláhuac 178, al día siguiente de la muerte de cinco integrantes de la familia Narezo y de dos trabajadoras domésticas.
Aun cuando autoridades judiciales no han confirmado ni desmentido la versión sobre el presunto multihomicida, éste ya es buscado.
Una de las hipótesis que maneja la Policía Judicial desde un principio, es que las víctimas conocían perfectamente a quienes finalmente los ultimaron. Esto se basa en que ninguna de las cerraduras que da acceso al inmueble, propiedad de la Narezo Loyola, fue forzada.
Bernardo Bátiz, procurador General de Justicia del DF, refirió además que descartaban el narcotráfico como principal móvil de los hechos.
Cabe destacar que uno de los sobrevivientes y amigo de la familia, también se le relaciona como amigo de Orlando Magaña, por lo que las indagatorias de la Judicial lo ubican como el responsable de dicho homicidio.
De ser así, según agentes judiciales encargados del caso, se estaría buscando además a cómplices de Orlando Magaña, toda vez que en el multihomicidio participaron por lo menos de tres a cuatro personas.