MÉXICO, D.F.- Ignacio Trelles, ex seleccionador mexicano, afirmó que el balompié local debe tener en esencia un sentido nacionalista, el cual permita conformar un equipo con jugadores y cuerpo técnico que verdaderamente sientan los colores de la camiseta, y reconoció la necesidad de trabajar más para elevar su competencia a nivel mundial.
El técnico con una experiencia de 70 años en el futbol comentó que también debería otorgarse al estratega de la selección total libertad para elegir a los jugadores que considere idóneos para integrar al cuadro nacional, y no se los impongan como le sucedió a él en una ocasión.
Trelles recordó que cuando estuvo al frente de la selección mexicana antes del Mundial Inglaterra 1966, los dirigentes de entonces le impusieron al primer extranjero naturalizado mexicano, el argentino "Charro" Lara, del que afortunadamente -dijo- nunca eché mano de él pues sufrió una lesión que le impidió jugar.
En las instalaciones de Cruz Azul en La Noria, en el sur de esta capital donde trabaja desde hace varios años en las fuerzas básicas, don Nacho, como se le conoce, destacó que es importante que el nacionalismo esté por encima de intereses personales.
Dijo que él como técnico nunca hubiera convocado al argentino naturalizado mexicano Gabriel Caballero, quien integró la selección que participó en el Mundial Corea/Japón 2002.
El seleccionador nacional en las Copas del Mundo Suecia-58, Chile-62 e Inglaterra-66, agregó al respecto que muchas veces los jugadores impuestos no "sudan" la camiseta, y defendió, asimismo, su preferencia porque el técnico nacional también sea mexicano por nacimiento.
"El futbol tiene nacionalidad porque es muy acendrado el amor que cada persona, cada jugador tiene por su país, y eso se manifiesta en un partido de futbol impulsados por un himno y bandera nacionales, y eso significa mucho, sobre todo en competencias internacionales, en las que se tiene que dar todo", subrayó el entrenador de 83 años.
El siete veces campeón del futbol mexicano con los equipos Marte (desaparecido), Zacatepec (ahora en Primera A), Toluca y Cruz Azul, indicó que a nivel clubes se acepta en la mayoría la presencia de jugadores y técnicos extranjeros, porque su conformación es diferente al de una selección nacional.
"No sólo en cuanto al futbol me inclino por el nacionalismo, sino en cuanto a toda la vida de México, pero eso no quiere decir que no acepte aspectos importantes de quienes llegan de fuera en cualquier actividad, siempre y cuando su aporte resulte en beneficio para el país, en este caso, del balompié nacional", señaló.
Ignacio Trelles Campos, quien se inició como futbolista con el club Necaxa de 1932 a 1943, manifestó que si él fuera directivo, tampoco le daría el mando de la selección nacional a un técnico extranjero, al considerar que en México hay muchos hombres capaces de hacer crecer al equipo futbolísticamente.
"El futuro de la selección está en que se debe formar con jugadores netamente mexicanos de un excelente nivel, y este nivel se debe mostrar en participaciones internacionales para hacer del conjunto uno de los más competitivos, con un futbol de calidad que lo lleve a los primeros planos en el mundo", sostuvo.
Opinó que se debe mejorar el nivel del balompié mexicano con un trabajo bien planificado, que lo apliquen los directivos, los futbolistas y técnicos, y aprovechar que varios países se han estancado futbolísticamente.
Lamentó el ex técnico del Atlante y América, entre otros clubes de la Primera División, que este proyecto aún no se lleve a cabo, pero recomendó poner decidida atención a la labor que se realiza con los jugadores juveniles.
"México tiene futuro y tiene que aprovecharlo para que mejore su nivel de juego. Por ello la importancia de trabajar 100 por ciento con las fuerzas básicas", sostuvo el técnico, uno de los más respetados en el medio futbolístico local.
Hizo hincapié en la necesidad de contar con medios de información más responsables y realistas con el trabajo que realiza la selección nacional, y recomendó no dejarse llevar por falsas estadísticas.
Nacho Trelles dejó el futbol como jugador por una fractura de tibia y peroné que le provocó el portero del Marte, "El Pulques" León, en 1948, cuando vestía el uniforme del Atlante. Destacó que él junto con José Antonio Roca y Raúl Cárdenas son de los pocos técnicos que pueden hablar del futbol mexicano.
Sostuvo que a lo largo de su trayectoria, el balompié ha tenido algunos cambios como en el reglamento de juego, las estrategias y las formas de manifestarse, no así en aspectos fundamentales. "En la actualidad los federativos y dueños de los equipos no se conducen como en el pasado. Ahora hay diferencias muy importantes.
Antaño el futbol se manifestaba en su esencia completa, hoy en día esas condiciones del balompié tan importantes están sujetas y modificadas por aspectos político-económicos", subrayó.
Destacó que en los últimos 20 años ese cambio ha sido notable, lo que ha provocado que el futbol haya disminuido en su manifestación pura y los dirigentes se preocupan demasiado en los aspectos político-económicos que en la actualidad rigen en todo el mundo afectando al balompié.
Todos esos cambios los ha observado Ignacio Trelles, quien aún se niega a plasmarlos en un libro por considerar que le llevaría mucho tiempo y no podría conjugarlo con la actividad que realiza en Cruz Azul, por lo que prefiere hablar de todas sus experiencias cuando se lo soliciten.
El "viejo zorro", como algunos medios lo identifican por su amplia experiencia, reveló que el uso de la cachucha, una de sus principales características, lo inició por recomendación médica para impedir que el sol le dañara la piel en el rostro.
"Es cierto que es parte de mi personalidad desde hace muchos años en el trabajo de cancha, pero no me gusta que me digan ‘El Cachuchas’, porque es despectivo", juzgó Trelles.