FRANCISCO I. MADERO, COAH.- El municipio no logra captar ingresos propios, a la fecha la recaudación del impuesto predial registra un fuerte rezago, apenas el 25 por ciento de los contribuyentes ha cumplido con este pago.
El tesorero municipal Rafael Román Rodríguez, dijo que desgraciadamente la población maderense no tiene la cultura del cumplimiento de sus deberes como ciudadanos y por este motivo se tiene un rezago del 75 por ciento
El funcionario dijo que se debe insistir para que la población acuda a cumplir con esta obligación porque aseguró que estos recursos son utilizados para realizar las diferentes obras que necesita la ciudad.
Román Rodríguez señaló que la captación de este impuesto se toma como base para la asignación de fondos federales, con los cuales se contribuye al desarrollo de la ciudad y de las comunidades rurales.
“Con estos recursos se hacen mejoras a las escuelas, obras de tipo social, apoyo a damnificados, becas para personas de escasos recursos y mejoras a la comunidad como son pavimentación, alumbrado público, construcción de plazas, introducción de la red de agua potable y drenaje”, dijo.
El tesorero municipal dijo que deben pagar impuestos todos los predios urbanos y rurales, las plantas de beneficio, los establecimientos metalúrgicos y construcciones.
Dijo que por otra parte están exentos de pagar predial la gran mayoría de los predios ejidales y comunales de este municipio, sin embargo cuando existe parcelamiento ejidal el impuesto debe cubrirlo individualmente cada ejidatario y también están exentos algunos casos especiales de adultos de la tercera edad.
Román Rodríguez dijo que existen sanciones para aquellas personas que no cumplen con su obligación de pagar este impuesto, que puede ser desde una multa hasta el embargo del inmueble, mismo que podría ser rematado para que el ayuntamiento recupere los adeudos que tiene el propietario, sin embargo el funcionario aseguró que el municipio ha sido bastante tolerante en este sentido.
El Tesorero exhortó a la población para que acuda a cumplir con esta obligación fiscal para que estos recursos puedan ser utilizados en obras que beneficien a toda la comunidad y que vendrían a mejorar su nivel de vida.