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México, D.F.- El ex presidente Miguel de La Madrid Hurtado consideró ayer a la globalización mundial, cuya consecuencia es un planeta en el que abunda la desigualdad, el desempleo y la pobreza, cada día tiene menos adeptos y más impugnadores.
Al dictar la conferencia magistral, “Globalización: saldos y encrucijadas”, el ex mandatario describió una “fotografía económica” del mundo, al señalar que en 80 países actualmente el ingreso por habitante es menor que el de hace una década.
Indicó que aunque el proceso globalizador no es ninguna novedad, en la actualidad posee características que la distinguen por su impacto social.
El resultado, agregó, es una economía planetaria; mercados financieros que contratan las 24 horas; empresas multinacionales que hacen parecer pequeños a algunos países, nuevas formas de derecho internacional y el desarrollo de estructuras regionales y mundiales de gobierno, entre otras.
Hoy en día, subrayó, existe “una tierra de nadie en responsabilidades”, pues las instituciones políticas, nacionales e internacionales, están debilitadas por vacíos normativos, y por otro lado hay una discrepancia entre un mundo globalizado y regionalizado y los gobiernos nacionales que establecen la política.
De ahí que este fenómeno tenga menos adeptos cada día y más impugnadores, porque los saldos son “una profundización de las asimetrías”, pues beneficia a los países desarrollados y un pequeño grupo de los del este de Asia, y rezaga a las naciones en desarrollo.
En este sentido, refirió que en las naciones en desarrollo, el 46 por ciento de la población mundial, 3 mil millones de personas viven con menos de dos dólares diarios, y de éstos, mil 200 millones lo hacen con menos de un dólar; mientras el 20 por ciento de la población mundial se lleva casi el 80 por ciento del ingreso mundial.
Al referirse a los países ricos, De la Madrid Hurtado manifestó que en ellos también se agudiza la desigualdad. En Estados Unidos el uno por ciento más rico se embolsó el 70 por ciento de toda la riqueza generada desde mediados de los años 70, argumentó.
Los 84 individuos más ricos del mundo poseen una riqueza que excede al PIB de China, con sus mil 300 millones de habitantes y calificó como “patéticos los resultados a nivel social, pues 50 mil personas mueren diariamente de desnutrición y pobreza.
De la Madrid dijo que en América Latina la globalización se ha traducido en inseguridad, pobreza y desempleo. El 44 por ciento de los habitantes de la región es pobre y el PIB para este año se espera que sea de menos 0.8 por ciento.
“Venezuela arde, Colombia se mata, la crisis Argentina casi tumba a Uruguay y a Paraguay. Brasil es incierto. Centroamérica continúa postrada. Y la estabilidad de México y Chile se acompaña de graves carencias”, apuntó.
Por primera vez en 20 años, anotó, el comportamiento del PIB en la región será de bajo cero y no existen condiciones para resolver una ecuación fundamental, es decir, como aumentar las exportaciones y el ahorro no para evitar la dependencia de los capitales extranjeros, que han reducido su flujo a estos países.
Recordó que las reformas estructurales fracasaron en buena parte en América Latina, porque se hicieron de forma “mediocre” y actualmente es difícil conseguirlas, ya que los objetivos gubernamentales y de los partidos de oposición son más electorales que de Estado, concluyó.