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MÉXICO, D.F.- Como "una peruana pasteurizada mexicana", así se define la limeña de 1.76 metros de estatura -sin tacones- Ingrid Yrivarren, atractiva conductora y periodista de uno de los principales segmentos en el programa matutino de CNI Magazinne 40.
Con 12 años de experiencia en noticieros, se preparó para ser chef, con estudios en Historia del Arte en Italia y programas especiales realizados sobre moda en Nueva York, París y Milán, Yrivarren, soltera y con dos hermanos, la mayor vive en Grecia, se dio a conocer en México, primero como lectora de noticias en Canal 4, luego en Sydney 2000 al lado de Rebeca de Alba y después con Lourdes Ramos y Jorge Berry en el matutino Primero Noticias, a cargo de la sección de internacionales.
-¿Por qué dedicarte a las noticias y no a la actuación o el modelaje? –“La conducción y las noticias son lo que más me fascina en mi trabajo. No me imagino haciendo otra cosa. Después de hacer mis pinitos en Perú, fui imagen y conductora en USA Network con el programa Cinemanía. Siempre entendí que en el mundo informativo el protagónico no eres tú, sino la noticia.
En Magazinne 40 tengo oportunidad de ser más yo, hacer más cosas, con menos recursos, pero con más imaginación. Mi segmento entra alrededor de las 8:30 horas y se compone por temas como salud, sexualidad en la pareja, mujer, moda, sociales, espectáculos, gastronomía y entrevistas de fondo. De las que me han gustado: José Luis Cuevas, Martha Chapa, Brian Weiss y Andrés García.
Busco el lado humano y la interacción con el teleauditorio. Se ha integrado un agradable y eficiente equipo de trabajo con Julieta Lujambio, Ricardo, Verónica del Castillo, Fabiola Klamsky, Raquel Méndez e Irma Angélica Vargas”.
-¿Por qué preferiste quedarte en México? –“A México siempre le encontré un encanto especial, una conexión y sensaciones especiales. Como país me comenzó a coquetear, hubo enamoramiento y terminé casándome. Tengo un proyecto con Televisa para el año entrante y ojalá resulte. La respuesta ha sido mejor de lo esperado sin tener publicidad, espectaculares y promoción”.
-¿Belleza y conocimiento van de la mano en la televisión? –“La apariencia es básica y la belleza es un regalo. Pero aunque viniera envuelto muy bonito, si adentro no hay nada interesante, de nada sirve. La belleza interna nunca se acaba. Creo en buscar el balance y rescatar valores. Atesoro una frase de Atahualpa Yupanqui: ‘El estado ideal del ser humano es que deberíamos ser los eternos estudiantes’.
La televisión es más machista, marca prototipos y hace creer que la belleza en la mujer no va de la mano con la inteligencia. La evolución de la mujer desaparece aquello de ser la costilla de Adán. A cuadro se pueden ver hombres no necesariamente guapos, con lentes y canas, y no pasa nada. No se les resta su credibilidad. En la mujer no sucede así”.
-¿Cómo te conquistan? –“No hay como la amabilidad, con rosas blancas que son mis favoritas. Me gusta el hombre preparado, inteligente, detallista, de alma buena y con sentido del humor. La inseguridad en el hombre es sinónimo de miedo. En este momento estoy acompañada, no es del medio periodístico y menos del artístico. Ya basta conmigo. Pero mi prioridad es mi profesión”.
-¿Y el matrimonio está cerca? –“No sé, no lo puedo determinar. Ya avisaré”, -dice entre risas-.
Aunque no frecuenta con regularidad a sus compatriotas en México, Ingrid reconoce la trayectoria de artistas como Tania Libertad, Kokín, Saby Kamalich, Ricardo Blume, Patricia Pereyra, y Cristian Meier.