El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Estaba viviendo una fuerte depresión, cuando recibió la noticia de que su tema Libre había sido seleccionado para participar en el 14 Festival de la Canción de la Esperanza. Nunca imaginó que obtendría dos premios en dicho certamen: el de mejor intérprete y el segundo lugar en la mejor canción.
José Mario Pérez Morales vivió uno de sus mejores días el pasado 6 de noviembre. El teatro Isauro Martínez fue el foro donde se realizó el concurso organizado por la Universidad Iberoamericana, mismo que reúne a excelentes intérpretes y compositores del país.
Él nunca buscó participar, incluso fue por otras personas que decidió inscribir uno de sus temas, ese que superó al resto de los concursantes.
Con 22 años de edad y metido en la música desde hace 16 años, este lagunero está seguro de que algún día llegará la fama para él, aunque no es algo que le quite el sueño, pues a lo largo de su carrera ha tenido la oportunidad de cantar en importantes escenarios.
“Claro que es tentador que todo mundo te conozca pero ese no es mi principal objetivo. Yo soy una persona altruista, me gusta servir... tengo mis propios proyectos, compongo canciones, escribo y transmito todo lo que tengo para que le llegue a las personas”, dijo en entrevista.
Una gran sonrisa fue su carta de presentación; desde que empezó a hablar trasmitió buena vibra y unas ganas inmensas de que la gente identifique sus canciones.
“Yo canto varios géneros como música pop, norteño, ranchero, balada incluyendo ópera. He tenido la oportunidad de cantar varias veces con la Camerata de Coahuila y también en otras ciudades del país, así es que ya tengo la experiencia de haber estado en un escenario y ser aclamado por un público”, dijo.
Cuando supo que Televisión Azteca estaba haciendo casting para elegir a los 14 integrantes de La Academia, José Mario no dudó ni un instante en ir, pero lo que realmente le importaba era ver a su “competencia”, no tanto quedar entre los elegidos, pues estaba consciente que quedarían seleccionadas las personas que cubrieran el perfil que necesitaba el programa.
“No hay que olvidar que La Academia es un programa de televisión, donde sus ‘protagonistas’ deben cumplir un perfil para pertenecer a él; necesitaban muchachos con quienes se identificara la gente por eso hay una gordita, la morena, la tierna... etc, varios tipos de personas”.
¿Deseabas quedar en La Academia? “Créeme que no, yo persigo cosas reales y concretas. La Academia no me interesa porque sé que algún día conseguiré lo que quiero... no ansío a Tv Azteca ni Televisa, además no digo que deseo el reconocimiento del público porque ya lo he tenido”.
José Mario se tornó molesto hacia los comentarios que han hecho de los alumnos de La Academia, ya que se llegó a decir que Myriam, Víctor, Yahir, Migue Ángel y todos los estudiantes son las mejores voces de México, aseveración que se le hace injusta a este intérprete. “No estuvo bien que en un momento empezaran a decir que quienes ganaron eran las mejores voces del país, si fuera eso deberían haberse asomado a los conservatorios, ahí están las mejores voces de México”.
Por el momento, José Mario está listo para ir de nueva cuenta al Distrito Federal a estudiar a la academia de Amparo Rubín, después... el destino lo dirá.
Talento innato
Desde pequeño, José Mario ha tenido el don del canto y la música, el cual ha permitido abrirse campo en el medio del espectáculo.
-Sus inicios fueron en la rondalla infantil Profesor Jaime Ávila Canedo, agrupación a la que lo metió su madre al verle aptitudes musicales.
-Estudió con el profesor Francisco Valdés Barba, director del coro de Icocult.
-Actualmente trabaja en dos antros de Gómez Palacio donde comparte el escenario con Omar Guzmán y Loreley Cevallos, conformando el trío Santos Inocentes.
-Ha cantado en varias ocasiones con la Camerata, donde consideran que su voz es versátil.
-No se dedica únicamente a la ópera porque no deja de ser un género más de la música. “La música es amplia, mi voz entra en cualquier género. Así es que me da lo mismo”.
-José Mario contó que en los castings de La Academia los participantes debían cantar durante 40 segundos, tiempo que considera insuficiente para mostrar el talento y potencial de la persona.
-Aunque le gustan todos los géneros, el lagunero no descarta en dedicarse a la música pop, uno de sus géneros favoritos.