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México.- Juan Manuel Bernal se prepara para iniciar la promoción de su película Sin ton ni Sonia, estelarizada también por Cecilia Suárez y dirigida por Carlos Sama.
Después de un año de trabajo y poca solvencia económica, esta película promete ser un éxito y las personas que trabajaron en ella están seguros de que tendrá un buen ciclo.
“Nos dio mucho trabajo terminarla. Todos los que estamos involucrados creemos que es una película muy buena, aunque aún no la he visto. Apenas la terminamos este año, ya que en diciembre del año pasado la tuvimos que parar porque no teníamos recursos”.
La historia trata de un joven que por su educación y lo que marca la sociedad, no se encuentra a sí mismo. Esto repercute en el amor y en la inestabilidad que encuentra por estar solo.
Calificada como comedia de humor negro, cuenta otra historia simultánea sobre la vida de una anciana que se dedica al tráfico de órganos y al final ambos relatos se llegan a juntar.
Bernal aseguró que se siente más tranquilo ya que su vida está un poco más organizada y sin tanta presión, a lo que dijo: “Tengo mucho trabajo, afortunadamente, pero como que ahora me organicé más por lo que ahora tengo un poco de tiempo libre”, añadió.
Y por si fuera poco, Juan Manuel Bernal tuvo la oportunidad de trabajar por primera vez en un filme internacional llamado Blue Berry, producida en Francia y que participará el próximo año en el Festival de Canes.
“Aunque tengo una participación muy pequeña, estoy muy emocionado porque con esta película probé lo que es trabajar para el cine internacional, y en México se estrenará para el próximo año.
“Es un filme que será vendido en todo el mundo, ya que está basado en un cómic francés muy famoso en toda Europa. Nunca había trabajado en una empresa internacional, con un reparto de ese tamaño, con esas magnitudes y la verdad estuve impactado por su tecnología, por lo que aprendí mucho”.
Explicó que la gran diferencia entre una producción mexicana y una internacional, es que en nuestro país existe mucho talento aunque poca inversión para terminar de realizar una película.
“En México hay un enorme talento y grandes actores. La diferencia es en su manera de ver las cosas. Los extranjeros pueden hacer una película de 25 millones de dólares, y eso te da la pauta para hacer en más tiempo las cosas sin prisas y sin que se coman las producciones”, indicó.
Actualmente, está preparando la obra de Titus Andronicos, basada en una obra de Shakespeare y que se estrenará en el Cervantino, será dirigida por Ana Francis, y cuenta con la participación de Julio Bracho, entre diez actores más.